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       Nabil Khalil PhD Sitio Web - Versión en Español

 
 
 
 

 

 

 

 

 

 

 

 Fidel “La contraofensiva estratégica”-Capítulo 4: Noviembre de 1958.

 
 
 
 

De izquierda a derecha, el primer teniente Rubén Fonseca Guevara y el comandante Guillermo García Frías, tras la toma de Palma Soriano.

Sábado 01

Sobre la creación del Cuarto Frente bajo el mando del comandante Delio Gómez Ochoa, escribí a Lalo Sardiñas a comienzos de noviembre, además de participarle nuevas misiones y alertarlo sobre la posibilidad de que un golpe de Estado tuviera lugar en La Habana. Le advertí que el derrumbamiento de la tiranía comenzaría por Oriente, y que, en ese caso, lo que debía hacer era cerrar la salida de la provincia.

Sierra Maestra

Nov. 1, 58

Querido Lalo [Eduardo Sardiñas]:

Recibí el informe tuyo que ayer mismo se leyó por Radio-Rebelde, quitándole solo algunos detalles de lugares que omití. Lo encontré todo muy interesante, así como la carta de [Manuel, Piti] Fajardo y las de los militares.

Los planes siguen exactamente como los trazamos aquí. Ya mandé a Néstor [Labrada] con 25 hombres más. También mandé una patrulla de muchachos de Puerto Padre que me parecen muy buenos, para que operaran bajo tus órdenes; llevan 13 armas.

Te comunico también que he decidido nombrar un jefe superior en todo el territorio donde operan las columnas 12 y 14, es decir: Victoria de las Tunas, Puerto Padre, Gibara, Holguín y parte de Bayamo. La falta de un mando superior en todo el territorio de esos municipios puede ser muy perjudicial. Siendo la zona tuya la más importante, en un momento dado podría ser necesario llevar refuerzos de la zona de Holguín y Gibara. Existiendo un jefe superior, este puede dar las órdenes inmediatas para el envío de dichos refuerzos. Para dicho cargo he designado a [Delio Gómez] Ochoa que ya salió con una columna. Yo le he dicho a Ochoa que el grueso de las tropas deben concentrarse en la zona tuya; así que todo sigue exactamente igual en cuanto al territorio tuyo y a la jurisdicción de tu columna; tu misión sigue siendo también la misma. Lo que me ha decidido precisamente a crear un mando superior es asegurar el éxito del objetivo estratégico que a tu columna corresponde; yo estoy seguro de que tu parte marchará perfectamente, pero no tengo la misma seguridad en cuanto a la parte que está detrás de ti, es decir en Holguín y Gibara, pues entre la gente de Cristino [Naranjo] y la de [Orlando] Lara no hay mucha simpatía, por otro lado la tropa de [Eddy] Suñol está creciendo notablemente y habrá que convertirla en una columna. Si esas fuerzas que están detrás de ti, no funcionan bien, los planes pueden fracasar. Para quitarme esas preocupaciones, decidí juntar los cuatro municipios en un solo frente, que se llamará Nº 4, designando a Ochoa Comandante del mismo.

No te quise dar esa tarea a ti porque me parece imposible que puedas atender al mismo tiempo tu línea de batalla y además todos los problemas que plantean cuatro municipios que ocupan una gran extensión. Así, Ochoa se encargará preferentemente de la coordinación de las fuerzas y tú de la línea de combate que mira hacia Camagüey. Hacia esa línea seguiré mandando refuerzos cada vez que pueda pues la considero la más importante de toda la Provincia.

Otra cosa quiero señalarte de mucho interés. [En] cualquier momento puede ocurrir un golpe de Estado en La Habana o un derrumbamiento de la Tiranía. Si tú observas que está pasando algo de esto, cierra inmediatamente la salida de la Provincia para evitar que se vaya una sola tropa de las que están operando en Oriente. Pase lo que pase todos los fusiles y armas en general que hay en esta provincia son para nosotros. De aquí no dejamos salir absolutamente nada. Te explico esto, porque como la Dictadura está tan débil, [en] cualquier momento los mismos militares le pueden acabar de dar el golpe; pero si eso ocurre no se puede decir que la revolución haya triunfado todavía. Los militares siempre hacen eso cuando ven que el régimen que han estado defendiendo se encuentra perdido, pero tratan ellos de conservar sus prerrogativas y no constituyen ninguna garantía para la revolución; la garantía única de la misma somos nosotros, los hombres que hemos surgido del pueblo y hemos convertido en el verdadero Ejército de la Revolución a gente humilde del pueblo que hoy son sus oficiales y soldados. Si Batista se cae, por un golpe de Estado Militar, antes de que nosotros hayamos acabado nuestra obra, no podemos dejar salir de Oriente una sola arma, y tenemos que proceder a exigir inmediatamente la entrega de las mismas a los rebeldes.

También es posible que el derrumbe comience por Oriente si algunas unidades se pasan a nosotros; en ese caso tan pronto recibas noticia confirmada que una compañía de la Dictadura se haya pasado a nuestras filas, cierra la Provincia porque viene el derrumbe.

Si nada de eso ocurre, entonces nuestros planes continuarán desarrollándose en la forma que tú conoces.

Ochoa estará cerca de ti dentro de diez o doce días. Cuando te entrevistes con él muéstrale esta carta.

A tu hermano lo van a operar estos días. Aquí nos ocupamos de cualquier asunto de tu familia enseguida y a los familiares de los demás muchachos, les hemos estado mandando lo ofrecido. Hoy voy a chequear con el dentista, encargado de esa ayuda, los que faltan.

Mandé mil balas de M-1, para esa columna con una gente de Lara que bajó hace días.

Deseándoles muchos éxitos, les envío a todos un fuerte abrazo,

Fidel Castro Ruz [firma]

Hotel Palma, lugar donde se encontraban atrincherados los militares de la tiranía, en diciembre de 1958.

DOMINGO 02

Una jornada antes de que se verificara la farsa electoral del 3 de noviembre denuncié el cinismo de la dictadura y el apoyo que recibía de la embajada norteamericana en La Habana. Antepuse al propósito iluso de la tiranía de aparentar que el pueblo votaba, la amplitud e intensidad de las acciones del Ejército Rebelde a lo largo del país que contaban con el respaldo popular. Tenía la certeza de que Cuba no aceptaría jamás el resultado de una burla así.

RADIO REBELDE: Noviembre 2 de 1958.

Una extraordinaria actividad revolucionaria se está desarrollando a todo lo largo de la isla.

De todos los frentes de combate llegan multitud de informes y comunicados de acciones que se suceden ininterrumpidamente. Puede decirse que todo el ejército rebelde está en combate. Las líneas de comunicaciones han sido desarticuladas por completo. Las ciudades están aisladas unas de otras en la mitad de la isla. Tres provincias están totalmente paralizadas, las más grandes en extensión y dos de las tres más grandes en población. En aquellas ciudades que mañana no estén convertidas en campo de batalla, la farsa electoral será el espectáculo más escandaloso de la Historia de Cuba. Sería bueno que la dictadura permitiese a los periodistas extranjeros visitar las ciudades de las Villas, Camagüey y Oriente para que vieran la realidad de lo que está pasando.

No circula un tren, un ómnibus, un camión, un automóvil. No se ve un alma en cientos y cientos de [kmtos km] de carretera. Ni un solo campesino en las zonas rurales más extensas de Cuba participará de ese proceso infame. Oriente, Camagüey y las Villas no son como La Habana. En la Habana todavía reina la represión y el terror de la tiranía. Los familiares de los soldados, los burócratas serán obligados a hacer número frente a los colegios como tratan de hacer también con los trabajadores el traidor Eusebio Mujal y su pandilla. Todo un gigantesco aparato de terror y de control se ha puesto en funcionamiento para producir en La Habana las apariencias de unas elecciones. Sin embargo ya todas las cédulas están recogidas, ya todos los candidatos han sido designados de antemano, ya todas las boletas están llenas. Los que concibieron la Democracia como un hermoso sistema de gobierno del Pueblo y por el Pueblo, jamás pudieron imaginar semejantes elecciones, semejante cinismo por parte de los que precisamente han destruido a la democracia y encima de ello, son tan descarados que tratan a toda costa de hacer creer que el Pueblo vota. No tienen siquiera el valor de quitarse la máscara; son tan estúpidos que aunque no existe un solo ciudadano en este país que crea en esas elecciones ni albergue la menor duda sobre el carácter tiránico y sanguinario del gobierno que está sufriendo Cuba desde hace siete años, se han empeñado en escenificar la repugnante pantomima para [un] engaño ¡dios sabe de quién! porque no hay país en el Mundo, mucho menos de América Latina, que haya presenciado tantas veces espectáculos parecidos, que pueda darle seriedad alguna al grotesco y macabro episodio. Más valía y era todavía más honrado que hubiesen quemado en una gigantesca pira todas las cédulas de nuestros esclavizados ciudadanos, y hubiesen declarado ante el Mundo que son dictadores, que han estado gobernando y quieren seguir gobernando porque se creen amos omnímodos de un rebaño humano, que están ahí porque todavía no le han arrebatado el fusil al último de sus esbirros; eso con todo, sería menos cínico, menos hipócrita, menos miserable, que prostituir de tal modo la palabra elecciones, que pisotear tan desvergonzadamente el Honor y la Dignidad de Un Pueblo entero.

Por nuestra parte no vacilamos en afirmar que jamás Cuba aceptará el resultado de semejante burla, aunque Mr. Smith la santifique y la bendiga. ¡Estúpidos no solo los que han promovido ese espectáculo infamante sino también los que han albergado por un momento la peregrina idea de que van a cosechar con esas siembras de injerencismo, crimen, desvergüenza y traición, algún fruto de paz y solución a los problemas de Cuba! Mas, no nos quita el sueño a los que estamos en el camino recto, porque sabemos que pronto, muy pronto la Revolución barrerá de una vez y para siempre con tanta inmundicia.

Rendición de los guardias de la tiranía al mando del capitán Sierra Talavera, Palma Soriano, diciembre de 1958.

RADIO REBELDE

¡ÚLTIMA HORA!

¡Parte de la comandancia general sobre la batalla de Santiago de Cuba!

¡Repetimos!…

Poderosas columnas del ejército rebelde tienen rodeada la ciudad de Santiago de Cuba.

Las fuerzas enemigas están sitiadas por tierra y tienen cortada la retirada.

El día 30 en horas del mediodía, una fuerza enemiga intentó salir por la carretera de Santiago al Cristo, siendo interceptadas y batidas totalmente, por fuerzas de la columna 9, “Antonio Guiteras”, que manda el Comandante Hubert [Huber] Matos.

El combate comenzó a la una y treinta de la tarde, y duró casi dos horas. De los vehículos enemigos, solo pudo escapar un carro de combate. Tres microondas y un camión blindado, cayeron en poder de nuestras fuerzas. Doce soldados enemigos, quedaron tendidos en el lugar de la acción. Otros seis cayeron prisioneros. Se ocuparon 24 armas largas: 3 fusiles ametralladoras y 21 fusiles, Garand, M-1 y springfields.

Tres gallardos combatientes del ejército rebelde, cayeron en la violenta acción, pero conquistaron para las armas revolucionarias, los laureles de la victoria.

El Estado Mayor enemigo, en un esfuerzo por ocultar a las propias tropas su desesperada situación, emitió un parte totalmente falso, anunciando 29 muertos rebeldes, por cuatro del ejército y 3 heridos.

Es inconcebible que la dictadura, haya tratado de tergiversar de tal forma, la derrota sufrida, a las puertas mismas de la ciudad de Stgo. de Cuba, donde todo el Pueblo necesariamente iba a conocer la Verdad, porque no es lo mismo una acción de guerra, que se escenifique en la órbita de una ciudad grande, y las que antaño tenían lugar, en los recónditos rincones de la Sierra Maestra.

Pero eso se explica por el hecho, de que para una tropa sitiada, como está la de la dictadura en Stgo. de Cuba, la derrota del Cristo, constituye un golpe moral tremendo.

Nuestra experiencia de lo ocurrido en las grandes batallas de la Sierra Maestra, nos permite asegurar, que grandes fuerzas de la dictadura están al borde del colapso.

Fidel Castro Ruz

Comandante-Jefe

Para Zoilo* [Ricardo Lorié, responsable bélico en el exilio]

Aviones Batista frecuente volar sobre pista primeras horas noche.

Horacio [Rodríguez, responsable de la pista de aviación rebelde en Cienaguilla] decir próximo viaje no encender pista hasta avión volar sobre ellas dos o tres veces desde Campechuela rumbo lomas.

Piloto debe hacer indicación dos rayas y dos puntos. Pedro Luis [Díaz Lanz] entender esto.

Alejandro

Este seudónimo fue usado más comúnmente por Marcelo Fernández, responsable de Organización del Movimiento 26 de Julio.

11:40 pm

Nov. 2/58

Para Zoilo

Pista estar lista recibir regalo pero no deber encender hasta avión se identificar primero.

Yo explicar motivo en mensaje anterior.

Si ustedes estimar muy necesario nosotros encender todo el tiempo.

Contestar rápido.

Alejandro

Sierra Maestra

Nov. 2, 58

Estimado Carlos Rafael [Rodríguez]:

Hace días que no tengo noticias de por allá abajo.

Me gustó el trabajo que hiciste sobre el combate del Cerro, lo único que ha obstaculizado su publicación es que yo estoy encargado en estos días de la propaganda, y como aparezco representado elogiosamente (por lo que te doy las gracias) no me parece correcto incluirlo en los programas que estoy confeccionando. De todos modos, cuando pasen estos días de mucho parte de guerra, cambiándolo yo algo en ese aspecto, se puede presentar. A mí realmente me impresionó ver estas cosas convertidas en temas literarios y comprendí cuántos asuntos de interés humano pudieran ser recogidos en poesías y obras como esa.

No había contestado varias notas tuyas por lo constante e intensamente ocupado que estoy; pero no vayas a estimarlo como una falta de delicadeza. Si así fuera, tengo un millón de ellas en mi haber, pues recibo todos los días un sinnúmero de notas y comunicaciones no alcanzándome el tiempo más que para los asuntos más urgentes.

Supongo estarán enterados de las noticias generales por radio rebelde. De las Villas, aparte del informe de Camilo, no se ha recibido más nada sobre la situación en esa provincia. Cables internacionales y programas de radio de Miami son las únicas indicaciones. Ahora con las carreteras interrumpidas el tránsito de mensajeros se complica.

Saluda a Pardo [José Pardo Llada] de mi parte si está por ahí. No recibo tampoco noticias de él hace días.

Parece también que se prolonga la reunión de delegados aunque solo por dificultades prácticas.

Vamos a ver cuándo puedo darme una vuelta por abajo. Tengo ganas de salir de la Sierra Maestra y marcharme también para el llano.

Dile a Más [Martín] que si no se siente viejo se dé un viaje por acá.

Saludos a todos. ¡Y ahorren víveres, que con el bloqueo va a escasear todo! Recomiendo sembrar hortalizas.

Fidel

Lalo [Eduardo Roca] y Nené [Manuel León]:

Había pensado ir a verlos ahora, lo mismo que al médico, pero no puedo darme ese lujo a lo que parece por [nota inconclusa que aparece en un cuaderno de apuntes]

De izquierda a derecha, el teniente Fidel Vargas, el comandante Juan Almeida y el teniente Israel Pardo Guerra.

LUNES 03

Nuestra estación de radio continuaba reportando las acciones bélicas en los diversos frentes de guerra. Por estos días eran numerosas las que se libraban en territorio del Segundo Frente.

ACCIONES DE GUERRA: Muertos dos soldados de la Dictadura y uno herido. Ocupadas tres armas largas.

El día 30 de Octubre a las 6 a.m. fueron sorprendidos tres soldados de la dictadura en las cercanías del poblado de Jauco en Baracoa. Al entablarse el combate resultaron muertos dos soldados y el tercero herido. Los soldados enemigos muertos se nombran Horacio Arias y Renier Cruz y el herido Gerardo Figueredo, que fue remitido a Boca de Jauco para que fuese atendido de sus heridas. Se ocuparon tres fusiles Springfield y 305 tiros.

Firmado: José Sotomayor, Capitán Compañía E

Cortada la Carretera de Cueto a Mayarí.

El día 2 de Noviembre una patrulla rebelde al mando del suboficial Vicente Blanco, emboscada en un lugar de la carretera de Mayarí, capturó y destruyó el automóvil del alcalde de Mayarí; también atacó a un transporte de soldados de la dictadura quienes se dieron a la fuga, resultando dos heridos. La misma patrulla procedió a romper la carretera de Mayarí, en el lugar conocido por Santa Isabel de Nipe, abriendo una zanja de 10 pies de profundidad por 45 de ancho. Asimismo, rompió la carretera en el lugar conocido por el Rayo. Fuerzas de la dictadura que trataron de obligar a 15 ciudadanos a tapar dicha zanja, al comprobar que no lo hacían como les ordenaban, abrieron fuego sobre ellos, matando a 3 infelices ciudadanos e hiriendo a seis.

Firmado: Teniente Raúl Tamayo Díaz

Combate en San José de Santana

Informes remitidos desde el segundo Frente oriental, “Frank País”, comunican igualmente que en el lugar conocido por San José, en las cercanías del central Santana, fué destruido un carro de combate enemigo ocasionándosele además a la dictadura de 15 a 17 muertos. El carro de combate fué destruido con granadas de fusil. El enemigo, protegido por la aviación, pudo recoger sus muertos, pero nuestras fuerzas lograron recoger más de 300 balas calibre 30 en el lugar de la acción.

RADIO REBELDE

ÚLTIMA HORA:

Radio Rebelde acaba de recibir una serie de comunicados sobre combates victoriosos de las tropas rebeldes en distintos puntos de la provincia de Oriente.

Se rindió el cuartel de Alto Songo. Ocupados 32 springfields, 3 M-1, 4 ametralladoras San Cristóbal, 25 revolvers, 6 pistolas, 7 000 balas 30-06 [30.06], 6 000 balas M-1, dos camiones y dos jeep.

Repetimos…

Informes acabados de remitir por el comandante del Segundo Frente informan que el cuartel de la guardia rural de Alto Songo se rindió, después de cinco días de sitio, a las tropas de la columna Abel Santamaría del Comandante Luzón [Antonio Enrique Lussón] sin que las fuerzas de la dictadura pudiesen romper el anillo para acudir en su auxilio. Fueron hechos prisioneros gran número de soldados ocupándoseles 39 armas largas: 32 fusiles springfields, 3 M-1, 4 ametralladoras San Cristóbal, 25 revolvers, 6 pistolas, 7 000 balas 30-06 [30.06], 6 000 balas M-1, dos camiones y dos jeep.

Las fuerzas del segundo frente Frank País desplegando una extraordinaria actividad durante los días de la farsa electoral han capturado al enemigo más de 100 armas largas y enormes cantidades de parque. Pasan de 100 los prisioneros que han caído en poder de nuestras fuerzas. Radio Rebelde espera noticias detalladas del Segundo Frente Frank País para trasmitirlas a nuestros oyentes.

NUEVA VICTORIA REBELDE EN LA ZONA DE HOLGUÍN

Repetimos: Nueva y aplastante victoria rebelde en la zona de Holguín.

Veinte soldados de la dictadura muertos; tres heridos, seis prisioneros; ocupadas 27 armas largas y miles de balas.

Repetimos…

Nueva y aplastante victoria rebelde en la zona de Holguín.

Veinte soldados de la dictadura muertos; tres heridos, seis prisioneros; ocupadas 27 armas largas y miles de balas.

Tropas rebeldes de la Compañía 3 de la columna 14 y fuerzas del pelotón de mujeres Mariana Grajales, escenificaron en el territorio de Holguín uno de los más fulminantes combates victoriosos de las fuerzas rebeldes. Solo dos soldados de la tropa enemiga lograron escapar, dejando antes sus armas. Las fuerzas rebeldes al mando del capitán Suñol interceptaron en la carretera de Holguín a Chaparra dos camiones de soldados enemigos, originándose un violento combate que culminó en la destrucción total de la unidad enemiga. Fueron ocupadas 27 armas largas: 24 springfields, una ametralladora calibre 45, dos ametralladoras San Cristóbal, dos pistolas calibre 45, 1 200 balas 30-06 [30.06], 54 balas calibre 45, 35 balas 45, 19 cananas, 95 balas M-1, 4 magacines de balas de ametralladora 45 y 7 magacines de San Cristóbal. Sobre el campo de batalla quedaron tendidos 20 cadáveres de soldados de la dictadura y fueron recogidos 3 heridos y 6 prisioneros. Solo dos lograron escapar. Tan enérgico fué el fuego de la fusilería rebelde y tan certero, que el enemigo apenas tuvo tiempo de hacer resistencia. Solo un soldado rebelde resultó herido. Esta acción hace ascender a más de cien el número de soldados de la tiranía muertos en los últimos días.

Debo añadir un hecho que ocurrió por primera vez en nuestra guerra. Como norma, cuando el jefe era herido o muerto, la unidad se retiraba de inmediato. Esta vez no ocurrió así. La fuerza que atacó fue fundamentalmente el pelotón Mariana Grajales, bajo el mando de la teniente Isabel Rielo. Suñol fue herido en los primeros momentos y lo tuvieron que retirar. El pelotón, inmutable, prosiguió el combate.

Ese pelotón, como conté, había sido entrenado en la Comandancia de La Plata. El blanco era una moneda de 20 centavos. El fusil: M-1, con mira Lyman, semiautomático, ligero, con peine de 10 balas. Fue la única unidad en la Sierra Maestra entrenada con tiro real.

Los disparos fueron tan certeros que en un tiempo más breve de lo calculado finalizó el combate. De 31 hombres que integraban la fuerza enemiga, que se movían en dos camiones, 20 murieron y tres quedaron heridos. Solo un soldado rebelde resultó herido.

Los combatientes Aeropagito Montero y Fidel Vargas, después del Combate de Palma Soriano.

noviembre 3 - 58

RADIO REBELDE

Última Hora

¡Tomado el pueblo de Alto Songo por las fuerzas rebeldes! ¡A las nueve y cincuenta de la mañana del día dos, se rindió la guarnición que defendía el ayuntamiento! ¡A las cinco y cincuenta del propio día se rindió la Estación de Policía! ¡El cuartel de la guardia rural continuaba sitiado y el pueblo en manos de nuestras fuerzas! ¡Combates en Santiago de Cuba, y otras ciudades de Oriente!

¡Repetimos!…

Informes remitidos por el comandante del Segundo Frente Frank País, comunican lo siguiente:

Unidades móviles de la columna 17, Abel Santamaría, al mando del Comandante Antonio Luzón [Antonio Enrique Lussón], penetraron en el pueblo de Alto Songo, a las nueve de la noche del día primero de Noviembre, atacando simultáneamente el cuartel de la guardia rural, la estación de la policía nacional y el ayuntamiento municipal, defendido por fuerzas enemigas. Al mismo tiempo que se realizaba el ataque a estas instalaciones militares, tropas rebeldes al mando de los tenientes Peña y Botello, atacaban el puesto militar conocido por la Araña. Este último punto cayó inmediatamente, resultando muertos dos soldados de la dictadura y uno herido, ocupándose 3 springfield y dos revolvers 45. A las 9:50 de la mañana del día dos, los defensores del ayuntamiento se rindieron a nuestras fuerzas. La estación de la policía resistió hasta las 5:50 del propio día, hora en que también se rindió a las tropas rebeldes, no sin que antes los defensores lanzaran botellas de gasolina a la casa de madera, desde la cual disparaban los rebeldes, ocasionando un incendio, lo que produjo la destrucción de dos manzanas de casas y de la propia estación de policía. Fueron hechos prisioneros el subteniente de la policía nacional Pablo Lafarcón Acosta, el cabo de la policía nacional Francisco Leyva Maceo; el policía nacional Teobaldo Ochoa, el cabo de la policía municipal Antonio Calá, y los policías municipales Benjumeno Concepción, Jorge Luis Julién, Juan Gilson, Bienvenido Limón, Andrés Arias, Isidoro Rodríguez, Jorge Parra Aguilera, soldado del ejército Julio Corzo, soldado del ejército Conrado Silva, soldado del ejército Osvaldo Pila, soldado del ejército Humberto Vinent, soldado del ejército Elpidio Ramos Sarmiento, soldado del ejército Rosario Iglesias Pérez, soldado del ejército Pablo García, soldado del ejército Darsi Daniten Pérez, y soldado del ejército Eladio Pérez Castillo. También fueron detenidos el doctor José Agustín Pargas, secretario de la Junta Municipal electoral y el jefe del vivac Eusebio Casamayor. Se ocuparon 31 armas largas; nueve carabinas San Cristóbal, siete carabinas M-1, doce fusiles springfield, y 3 automáticas Winchester. A las cuatro de la tarde del 3 de Noviembre, después de casi 48 horas de lucha, el pueblo de Alto Songo continuaba en poder de nuestras fuerzas y el cuartel de la guardia rural sitiado por completo. Junto con los prisioneros anteriormente señalados, fueron hechos prisioneros también numerosos confidentes, que estaban combatiendo junto a los militares. Las vidas de todos los militares prisioneros serán respetadas, conforme a las normas del ejército rebelde. Los confidentes capturados bajo las armas, serán sometidos a Consejo de Guerra Sumarísimo.

Firmado: Comandante Raúl Castro, Segundo Frente Frank País

La cuestión del ahorro de municiones seguía siendo una preocupación para mí; no cejaba en el empeño de fomentarla entre los combatientes.

Vilma y Raúl en Palma Soriano, fines de diciembre de 1958.

Sierra Maestra

Nov. 3 de 1958

Teniente Luis Pérez

Columna 31

Estimado Luis:

Me parece que han comenzado ustedes con mucho ánimo las operaciones y es bueno que ya hayan hecho contacto con el enemigo en dos ocasiones. Me preocupa solo un poco que con tanta prontitud hayas solicitado el envío de balas. Pienso dos cosas posibles: que los muchachos como nuevos al fin hayan gastado muchas balas en esas dos escaramuzas, o que tú pienses que tenemos un gran stock de balas en reserva y te parezca natural que se te provea regularmente de parque. Si los muchachos han gastado balas en exceso, el único modo de corregir esa tendencia es no mandándoles balas para que aprendan a ahorrarlas cuando vean que les quedan pocas. Si tienen la idea de que nunca les va a faltar porque se las vamos a mandar de aquí, no aprenderán a cuidar y ahorrar el parque. No hay peligro de que corran riesgos en el aprendizaje porque usando bien las armas con pocas balas se pueden defender perfectamente.

Por otra parte, tú tienes que tratar de resolver por tu cuenta lo más posible el asunto del parque. Nosotros aquí durante muchos meses, no recibimos otro parque que las balas que dejaban los guardias regadas. Una tropa pequeña como esa puede ser abastecida de parque perfectamente con un poco de colaboración de Manzanillo. Bastaría con que les mandaran a ustedes las que los guardias botan. Hay que tratar también de comprarle balas y armas a ellos mismos.

Yo las balas de reserva las voy distribuyendo con muchas restricciones consciente de que lo más grave que puede pasarnos es quedarnos sin parque.

Tampoco me gusta, te lo confieso que tan prontamente me hayas solicitado el envío de refuerzos en fusiles, aunque esta suele ser una tendencia muy común en todos los oficiales rebeldes. Las grandes limitaciones de recursos bélicos con que hemos luchado nos han obligado a hacer el máximo con el mínimo. Para empezar esa tropita está bien. Se debe reforzar a medida que las necesidades estratégicas lo exijan o lo permitan. Hay puntos mucho más importantes desde el punto de vista estratégico que requieren el envío de las armas. Mientras yo tenga que reforzar dichos puntos, no puedo mandar para ahí las armas. Es algo que debes comprender, aunque yo por mi parte sé que con más armas podrías hacer mucho más, como también habríamos ganado ya la guerra de haber contado antes con ellas.

Para conocer tu situación real de parque, en próxima comunicación infórmame cuántas balas le quedan a cada arma, después de las acciones de estos días incluyendo la de hoy. Toma siempre todas las medidas de precaución respecto a cualquier posibilidad de ataque enemigo contra ustedes. Si en el primer intento lo zurran bien, podrás sentirte mucho más seguro en la zona.

Te envío quinientos pesos.

Escríbeme a la vuelta de correo, y no tomes estas líneas más que como el deseo de orientarte, tratar de que te adaptes a nuestras realidades y sepas que en todos los órdenes tenemos que hacer un gran esfuerzo porque nos cuesta mucho adquirir las cosas. Estaré atento de tu situación.

Saludos a todos.

Fidel Castro Ruz [firma]

 

Los comandantes Raúl y Almeida, junto al Comandante en Jefe Fidel Castro. Las columnas bajo su mando cercaron a Santiago.

Martes 04

Sierra Maestra

Nov. 4, 58

Horacio [Rodríguez]:

Llegó antes de anoche un mensaje de Zoilo [Ricardo Lorié] que dice así:

Mandado Alemán listo jueves a viernes. Llegada de 8 y ½ a 10. Mantener campo encendido todo el tiempo. Confirmar este mensaje. Campo Santa Lucía paracaída llegada seducción radio 90. Firma Piloto Sansón. Aventura. Zoilo y Osvaldo.

Este mensaje parece que Sansón lo mandó a Zoilo a México sin conocer lo que tú habías mandado a decir de la luz.

Yo antes de anoche mismo respondí así:

Pista lista recibir regalo pero no deber encender hasta avión se identificar primero.

Yo explicar motivo en mensaje anterior.

Si ustedes estimar muy necesario nosotros encender todo el tiempo. Contestar rápido.

Alejandro

Esperaba respuesta ayer, pero tuvimos tan mala suerte que la planta de radio se descompuso.

Por tanto me decido a comunicarte lo que hay.

Así que el jueves y el viernes próximos de 8 y ½ a 10 deben estar alerta.

Sobre si enciendes o no la luz es algo que tú debes resolver según tu criterio.

Yo tengo esperanza de recibir alguna nueva noticia hoy. Si es así, esta misma noche te la enviaría para que llegue a tiempo.

Tú de todas formas debes estar en espera el jueves y el viernes en caso de no recibir nueva comunicación. Saludos,

Fidel

P. D. La parte del mensaje de Sansón que dice: “Campo Santa Lucía paracaída llegada seducción radio 90″. No entiendo bien esa parte del mensaje, pero confío que tú la entiendas porque estás más familiarizado con la cuestión.

Sierra Maestra

Nov. 4, 58

Alcibiades [Sotomayor]:

Los mulos que te dejó Nandín [Fernando López Castillo] se los puedes entregar a Manuel Carbonell.

Los que se le van a comprar a Celestino debes guardarlos ahí con aparejos y todo. Y que no se pierda nada.

Fidel Castro Ruz [firma]

 

En primer plano, de izquierda a derecha, el comandante Guillermo García Frías, Fidel, un combatiente no identificado y Celia; Palma Soriano, diciembre de 1958.

JUEVES 06

Almeida:

Creo que vale la pena prestarle atención a este asunto. El inventor es un químico eminente que además está dispuesto a entrenar un hombre nuestro, dando un viaje a esa zona que está cerca de donde él reside. Me parece que Pepe Luis [José Luis Carballo Bello], por su experiencia en trabajos similares pudiera ser la persona indicada. Para esto hace falta un hombre que decididamente quiera trabajar en el asunto. Pudiera rendir muy buenos frutos y con probar nada se pierde. Un satélite M-26 incendiario pudiera ser un arma muy efectiva. Puedes hacer algún experimento también con el otro material para ver sus efectos.

Fidel

S. Maestra, Nov. 6, 58, 4 p.m.

Sierra Maestra,

Nov. 6, 58

Horacio:

En este momento, Nov. 6 a las 10 de la noche, acabo de recibir este mensaje:

Solicitar tener lista campiña mareo desde mañana.

Avisar urgente si estar listo (estridencia).

Zoilo y Osvaldo

Otro mensaje más:

Encender campiña de nueve a diez tiempo jueves a viernes.

Informar si radio faro trabajar.

Zoilo y Osvaldo

El radio estuvo descompuesto 3 días. Tal vez al no recibir respuesta, no vengan, pero de todas formas tú, mañana viernes, debes encender el campo de 9 a 10 como ellos piden.

Yo esta noche les voy a decir que todo está listo.

Fidel Castro Ruz [firma]

P. D. Pienso que el primer mensaje se refiere al campo que está cerca de la costa en la Plata.

Fidel

S. Maestra

Nov. 6, 58

Horacio:

Mi respuesta hoy fué esta:

Todo listo recibir fecha hora y forma ustedes indicar.

Poder venir mañana viernes si querer. No poder responder si radio faro trabajar.

Campiña mar también lista.

Alejandro

Sierra Maestra

Nov. 6, 58

Estimado C. [Concepción] Rivero:

Yo no puedo resolver sobre lo que usted plantea sin recibir informe sobre el particular del Comandante de esa columna.

En camino hacia esa zona va el C. Gómez Ochoa que tiene jurisdicción sobre los territorios de Tunas, Puerto Padre, Holguín y Gibara. Con él puede usted tratar el asunto, para que resuelva, oído el parecer del Comandante de la columna 12.

Siento mucho esos problemas.

Fidel Castro Ruz [firma]

RADIO REBELDE

NOVIEMBRE 6, 1958

Posteriormente se recibió el siguiente comunicado del Comandante Delio Gómez Ochoa.

Reporte recibido de la Columna No. 32 José Antonio Echeverría.

El día 3 de Noviembre a las 3 a.m. una escuadra al mando del Teniente Emilio [Rodríguez, El morterista], hizo funcionar una batería de morteros, calibre 81 milímetros que había sido colocada a 500 metros del puesto de mando del ejército de la dictadura radicado en Bayamo y más conocido por “La Granja”. Por espacio de una hora sostuvimos el bombardeo sobre la posición enemiga, ocasionando enorme confusión, según informes que tuvimos, tuvieron gran cantidad de bajas, debido al número de tropas concentradas y también a la efectividad con que fue dirigido el fuego de morteros. El día 4 de Noviembre, a las 2 a.m., el Segundo Pelotón al mando del Capitán [Roberto] Fajardo, penetró en la ciudad de Bayamo, por la carretera de Jabaco, disparando sus fusiles automáticos, por las emboscadas enemigas allí situadas, retirándonos más tarde sin haber tenido contratiempo alguno.

Firmado: Comandante Ochoa

RADIO REBELDE:

Radio Rebelde vuelve a salir al aire hoy. Con gran pena para nosotros no fué posible transmitir durante los últimos cuatro días por motivos técnicos, pero aquí estamos otra vez y seguiremos estándolo porque ahora es cuando la Revolución redobla su esfuerzo en todos los órdenes.

Después de las infamantes elecciones del 3 de Noviembre, Radio Rebelde tiene ahora la palabra. Que se callen los politiqueros de una vez y para siempre. Ahí tienen los resultados de su tesis electoralista, entreguista y traidora. Ahora que nos dejen a los revolucionarios tomar la palabra y cumplir la promesa; de nadie más puede esperar Cuba su salvación.

 

Fidel rodeado de combatientes en Palma Soriano.

VIERNES 07

Sierra Maestra

Nov. 7, 58

Curunó [Braulio Curuneaux]:

Sitúa el tanque en lugar seguro. Que la gente de Pedrito [Miret] se encargue de custodiarle y ven con tu escuadra para una misión. Trae la calibre 30.

Fidel Castro Ruz [firma]

Sierra Maestra,

Nov. 7, 58

Che:

Calixto [Morales] compareció aquí como se le indicó y fué analizada su actuación de acuerdo con los elementos de juicio que obraban en nuestro poder.

La imputación principal, de haber cometido un acto contra la seguridad de los dirigentes y colaboradores del Movimiento publicando un manifiesto con nombres y apellidos, quedó descartada al comprobarse que no hubo tal publicación de manifiesto y sí ocho copias de un escrito dirigido a varias personas y que ninguna de estas copias cayó en manos de la policía.

No hubo elementos suficientes para juzgar su actuación desde el punto de vista de la disciplina, porque aquellos momentos fueron muy complejos y los compañeros que pudieran informar más concretamente sobre este aspecto están ausentes y algunos muertos.

Mi criterio es absolutorio para Calixto.

Por otra parte él explica su deficiencia física en los días de las campañas duras de la Sierra por un problema en la espina dorsal que los médicos le están tratando y que él ni siquiera conocía.

Te lo envío a esa para que se ponga a tus órdenes y tú, de acuerdo con la situación ahí, decidas en qué te puede ser más útil.

Por esta vía no te envío más noticias. Estoy en espera de noticias tuyas. No tengo más que las referencias de Bequer [Conrado Bécquer] que te vió al pasar por las Villas.

No he recibido ningún informe desde el que me enviaste cuando el combate en la Federal.

Abrazos,

Fidel

El proceder humanitario y caballeroso fue práctica cotidiana de las fuerzas rebeldes. La conversación de mi hermano Raúl con el teniente coronel Cossío del Pino, de la Cruz Roja cubana, muestra fehacientemente esa conducta intachable del Ejército Rebelde y su pronta disposición para proteger a la población civil.

Entrevista de Fidel y el general del Ejército de la dictadura Eulogio Cantillo, en las ruinas del central Oriente, 28 de diciembre de 1958.

CONVERSACIÓN POR RADIO ENTRE EL COMANDANTE RAÚL CASTRO Y EL TENIENTE CORONEL [Oscar] COSSÍO DEL PINO, DE LA CRUZ ROJA [cubana], SOBRE LAS BASES DE UNA TREGUA PARA LA ENTREGA DE PRISIONEROS.

AÑO 1958.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- Quisiera conocer si el Dr. Fidel Castro se está sintonizando, para hablar después con él.

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Quizás pueda venir por aquí. Ya yo le he mandado un recado urgente para allá.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- Pido que una nota que yo voy a darles sea copiada; yo voy a dictarles para que copien, para que mantengan el mensaje que yo tengo escrito copiado literalmente y comprobar después textualmente su escrito. Se refiere a los términos de tregua.

Dígame si están listos para copiar.

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Listo para copiar. Adelante.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- Buenas tardes, señor Castro. Cumplimenté la misión de entrevistarme con el jefe de operaciones, hice todos los planteamientos en la forma en que hablamos hoy por la mañana. Entonces él me ha dado por escrito -que es lo que yo estoy rogando que ustedes copien- las bases de la tregua, que equivalen a las mismas concertadas por la mañana, pero quiero de todas maneras confirmar la exactitud de mi transmisión con la recepción de ustedes.

Dice así: Tregua consistirá: primero, suspensión de operaciones aéreas en el área norte de la línea San Luis, Dos Caminos de San Luis, Songo, y en el Camino Santiago, Puerto Boniato, Dos Caminos. Segundo: durante la tregua las tropas en dicha área mantendrán sus posiciones sin efectuar movimientos militares. Tercero: el período de tregua será desde las 0:1 del lunes 10 hasta las 6:00 horas del martes 11.

Como usted habrá visto, señor Castro, los términos fueron los convenidos hoy por la mañana; pero hubo una pequeña modificación en la hora de la tregua. El jefe de operaciones aceptó la tregua oficial que usted señalaba hasta las 12 de la noche; pero la prolongó y me explicó que lo hacía de seis horas más, o sea, hasta las 6 de la mañana, de manera que ustedes tuvieran tiempo de dispersar sin dificultades ningunas de tipo militar. De modo que la única variación fue una prolongación de 6 horas más que les dá el jefe de operaciones para que al recibo de la recepción y trasmisión de este personal ustedes tengan tiempo, seis horas extra, para dispersarse.

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Mire, Tte. Coronel, aunque el momento no se presta para vanidad y actitudes orgullosas de ningún tipo, agradecemos al Jefe de Operaciones del Ejército adversario que haya cedido seis horas más, pero no para dispersarnos, porque si el asunto es para dispersarse, después que concluya la tregua que vengan ellos a ver entonces quiénes resultan dispersados.

Es decir, que nos perdonen este pequeño gesto de protesta, pero que tampoco ellos se valgan de la circunstancia para dejar de poner el tinte ese que ha caracterizado al Gobierno de la mentira. Es decir, que después de la tregua que vengan, y entonces veremos, en fin de cuentas, quiénes serán los dispersados.

Perdónenos usted, Tte. Coronel, y la Institución que usted representa por este hecho.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- La explicación que me dio el jefe de operaciones sobre la palabra dispersión, después de concluida la tregua, equivale a que él no conoce si con motivo de la recepción, de la entrega de ese personal, pudieran estar congregados en un lugar no habitual, y ya conocido fuera de su zona normal un número de personas representativas de ese Frente; y, por tanto, él concedía eso para la dispersión, es decir, volver a sus líneas las personas que por motivo de este acto de entrega y recepción pudieran haberse salido de sus líneas habituales o de sus posiciones. Esta fue la explicación que él me dio, y desde luego yo no encuentro otra; al usar yo la palabra dispersión era que pudieran congregarse en un lugar distinto para hacer la recepción y entrega. Si esta explicación está correcta, entonces podemos pasar a otro asunto.

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Muy bien la explicación de parte suya, y no era precisamente a usted, Tte. Coronel, a quien se la pedíamos; palabritas más o palabritas menos nada importa a nosotros, los hechos son los que importan, y en fin de cuentas los que determinarán el curso de esta guerra. Naturalmente que en vez de la palabra dispersión muy bien pudieron haber dicho resguardarse o replegarse, pero no dispersión, con la intención que indudablemente el jefe de operaciones del ejército enemigo debe haberla expresado.

Escuche: terminado el incidente, pasaremos a los puntos que se plantean aquí.

Dice:

uno: suspensión operaciones aéreas en el área norte de la línea San Luis-Dos Caminos de San Luis, y en el camino Santiago-Puerto Boniato, de Dos Caminos. Dos: durante la tregua las tropas terrestres mantendrán posiciones sin movimientos militares.

Está muy bien ese punto, aceptado por esta parte.

El período de la tregua, igualmente está muy bien. O sea, que de doce de la noche, o sea 0:1 del lunes hasta las seis de la mañana del martes; está muy bien igualmente.

Ahora sólo falta aclarar, en cuanto al punto uno, qué se entiende por la parte norte, o al norte de la línea San Luis-Dos Caminos de San Luis, etc.; qué se entiende por eso, y hasta dónde se puede comprender como territorio norte de esas líneas, porque precisamente mucho más al norte se están librando combates que no pensamos detener en ningún momento, porque no afecta en nada esta operación que queremos llevar a cabo.

Es decir, que sólo precisa que nos aclaren qué se interpreta de cómo se han de suspender las operaciones al norte de las líneas esas. Debe precisarse con más claridad qué puntos comprende, para que después no surjan malas interpretaciones, ni nada de eso. Es decir, que sobre este punto, el número uno, es sobre el único que se piden aclaraciones, para lo cual le pasamos el cambio a la Cruz Roja Cubana.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- Yo creo que es conveniente que se hagan esas aclaraciones, pues yo los términos no los conozco; supongo que abarcaban lo que se planteó de Bueycito, de Songo y San Luis, y además el camino de la ruta. Pero de todas maneras eso es motivo exclusivamente de aclaración que puede hacerse posteriormente si se aceptan en la totalidad las condiciones. Quiere decir, que yo tendría que consultar la aclaración para que se determine bien. Pero como yo no conozco de esos términos y esas cosas, pues entiendo pero no me responsabilizo, porque eso envuelve la solicitud formulada por ustedes; quiere decir, Municipio de Songo, Municipio de San Luis y la ruta que ha de seguir la Cruz Roja. Yo de todas maneras, cuando terminemos aquí, iré a aclarar y supongo que va a quedar debidamente aclarado, que es resolviendo a lo planteado por ustedes; y eso será motivo nada más de una pequeña rectificación o ratificación. Este asunto está correcto, podemos seguir tratando los otros asuntos.

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Muy bien, Tte. Coronel. Es más, nosotros haríamos extensivo para no andar diciendo líneas abajo o líneas arriba, y mantenemos que incluso -aunque eso no es obstáculo de ninguna clase- serán paralizadas nuestras operaciones en Songo y San Luis y todo el camino que hay que recorrer desde Santiago hasta Dos Caminos de San Luis. Es decir, que eso no es obstáculo de ninguna clase. Sólo quería aclararle que si precisamente son dos posiciones enemigas que están atacando en estos momentos mucho más al norte tropas de este Segundo Frente, no se interprete que se continúan esas acciones aprovechándose de la tregua, ni nada de eso. Que si quieren, que bombardeen allá donde se está combatiendo, que no es precisamente ni en San Luis ni en Songo. Por lo demás -trátelo usted de todas maneras- puede quedarse así; pero nosotros paralizaremos las operaciones militares, cosa que se comprobará por las órdenes que inmediatamente después de terminada esta conversación con usted trasmitiremos a todos los mandos militares.

Serán paralizadas las operaciones militares las 18 horas que comprende la tregua, en el Municipio de Songo, Municipio de San Luis, y en todo el camino que comprende de Santiago a Dos Caminos de San Luis. Así que sobre eso podemos darlo como terminado, como concretado, en cuanto a la contesta de estas notas que trae usted.

Podemos pasar a otro tema.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- Ok, de todas maneras, por si fuera necesario, yo haré la aclaración. Es importante que yo se la comunique. Pero si está debidamente comprendida en lo que ustedes me han manifestado, todo el Municipio de Songo, San Luis y el Camino, evitamos estos trabajos de ratificaciones. De modo que eso está correcto.

Lo único que quiero rectificarle, que ha sido posiblemente un lapsus de usted, señor Castro, es el término de la tregua: no son 18 horas, sino son 30 horas. Compruebe eso y ratifíquemelo para estar de acuerdo perfectamente los dos.

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Muy bien, creo que fue un lapsus mental mío lo de las horas. Efectivamente, desde la noche del domingo, las 12 de la noche, hasta las seis de la mañana del martes, efectivamente, veinticuatro y seis son treinta horas, rectificado el error en este aspecto; es decir, que son treinta horas de tregua. Le pasamos el cambio a ver qué continúa diciendo usted, Teniente Coronel.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- Aclarado ese particular, queríamos añadir que de acuerdo con nuestra contestación, por la mañana fue solicitado ya por la Compañía Cubana de Aviación la designación del funcionario de esa Compañía que irá acompañando a la Cruz Roja. No tengo contestación ahí, pero supongo que vendrá, y si no tenemos tiempo para anunciarlo, como el nombre no dice mucho en definitiva sino la jerarquía que él traiga, si no hay tiempo de todas maneras si me lo envían, irá acompañando a la Cruz Cubana, ya yo lo solicité.

Dígame si entendió bien esto.

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Muy bien, Teniente Coronel, podríamos en eso, incluso, ser hasta más amplios. Si telefónicamente usted se puede comunicar con la Compañía de Aviación, y efectivamente el delegado de esa Compañía no puede llegar a tiempo, y ellos delegan en usted, pues la comisión de la Cruz Roja que venga, también podíamos obviar en ese aspecto, en este caso, la presencia del delegado de la Compañía de Aviación.

Es decir, si no puede llegar a tiempo se le puede dejar, a los oficiales que sirvan de enlace, un pase para que con posterioridad entre en nuestro territorio -territorio libre de Cuba-, o de lo contrario que deleguen en usted o en la Comisión de la Cruz Roja Cubana la misión que él traería encomendada.

Es decir que, o se deja un pase con los oficiales de enlace o delegan en usted, o que venga. Es decir, que en este aspecto puede obrar usted con entera libertad en el caso ese. Es decir, que le pasamos el cambio a ver qué opina.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- Señor Raúl Castro, muchas gracias por esa facilidad, aunque nadie sabe naturalmente a veces los inconvenientes que se presentan y cuando uno concreta terminantemente, si después falla algo, resulta un inconveniente. Yo le agradezco esa facilidad que usted me ofrece, de modo que en ese particular estoy de acuerdo, y voy a pasar al otro problema.

En días pasados nosotros tuvimos necesidad, a una petición que nos formulara el director del leprosorio San Luis de Jagua, de solicitar un permiso del Comandante local en esa zona; él dio el nombre, debe saber quién es, este oficial de ustedes estuvo muy atento con el director y le dio todas las facilidades para que la Cruz Roja Cubana pudiera convoyar un camión con comidas para el leprosorio; allí hay -usted debe saberlo también, pero se lo repito- 400 enfermos, y naturalmente además el personal administrativo, pero yo creo que están incluidos, es decir, 400 personas.

Nosotros, con ese pase que nos dio el comandante local de esa zona, pasamos esa comida, e iba convoyado por una ambulancia nuestra y el propio transporte del leprosorio, pero era comida para cinco o seis días y ya están solicitando con verdadera urgencia que volvamos a enviarles comida.

Como que el lunes va a ser un día de tregua general en todos estos frentes, que comprende también hasta donde llega el hospital San Luis de Jagua -yo no conozco topográficamente la situación de este-, pero de todas maneras parece que para ir a San Luis de Jagua hay que tomar por la carretera del Cristo, entonces lo que yo estoy solicitando para aprovechar en un solo acto -porque estas cosas tienen todas estas dificultades- debíamos aprovechar el propio lunes para llevar esas mercancías que van a ser adquiridas en un almacén de aquí de Santiago de Cuba, hasta el hospital de San Luis de Jagua. Si hay la posibilidad de una aceptación por parte del doctor, que sea ese propio lunes, usted me la contesta ahora y entonces ultimamos los detalles.

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Muy bien, Teniente Coronel Cossío del Pino, efectivamente los cinco días que ocupamos el poblado de Songo, fue nuestra intención, apenas fue dominado militarmente el pueblo, encargarnos de todos esos asuntos; incluso, se había mandado una comisión administrativa para ver el problema del hospital de San Luis de Jagua, de los enfermos allí, que había efectivamente 400, pero desgraciadamente frente a los incidentes propios de la guerra, los continuos bombardeos y para evitar riesgos de la población, este mando ordenó la retirada de las tropas rebeldes de esa posición, y es por eso que no se atendió debidamente al hospital de San Luis de Jagua.

Por lo demás, no sólo el lunes día 10, ni tampoco sólo para el hospital San Luis de Jagua, para cualquier lugar, tanto para servir población civil que esté comprendida dentro del territorio libre de Cuba; o sea, dentro de este Segundo Frente Oriental Frank País, tanto como para servir población civil que viva dentro de los territorios dominados por el ejército adversario, tanto para atender soldados adversarios que se encuentren heridos, en todo momento y en cualquier circunstancia, la Cruz Roja Cubana encontrará de parte de nuestro ejército todas las facilidades que sean necesarias para que cumpla su altruista misión, ya sea sirviendo a un bando o a otro, ya sea sirviendo una población civil de un territorio o de otro.

Es decir, que específicamente si usted desea, el lunes se les dará esas facilidades, y los días y en cualquier circunstancia y en cualquier momento que usted lo desee. Para eso se cursarán órdenes hoy mismo a todos los mandos militares que comprenden este Segundo Frente Oriental Frank País, para que faciliten, viabilicen y no se obstaculice en lo más mínimo la labor de la Cruz Roja Cubana. Es decir, que le hago el cambio para ver qué opina usted.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- Escuchado perfectamente, y muy correcto señor Raúl Castro. En esas condiciones yo me pondré al habla inmediatamente con el director del hospital para que él vaya movilizando la parte de compra de esas mercancías y la forma de transportarla.

Mientras tanto la idea era, aprovechar la circunstancia de que en toda esa zona hay una paralización total y queríamos aprovechar, sin exigencias de ninguna clase, esa oportunidad. Yo voy a comunicarle al Jefe de operaciones y al de la base también, de la misma forma que lo digo a ustedes, que tenga conocimiento de que en un convoy, es decir, un ómnibus y una ambulancia, que van por la ruta señalada hasta Dos Caminos, va a salir otro con destino a San Luis. Irán uno o dos camiones, porque se va a procurar llevar alguna cantidad apreciable, supongo yo, no está en mis manos ni en mis cálculos -yo no sé qué instrucciones tienen allí de actuar-; pero quiero decir que hay la posibilidad de que puedan ser uno o dos, para no entrar en rectificaciones, pero para que ustedes sepan que un convoy va a acudir en auxilio de este tipo de hospital, y conozcan que hay dos convoyes de la Cruz Roja, que han hecho sus destinos. Me parece muy correcto. Yo hablaré con el Director del Hospital y me pondré en contacto con el jefe de operaciones a fin de que él también cumpla las instrucciones necesarias para llevarlos adelante.

Precisamente, yo acabo de recibir otra petición urgente del poblado del Cristo, del Colegio “Nuestra Señora de la Caridad”, que es una escuela de niños pobres, que está ubicada allí en el Cristo. Me explicaron que las clases las paga la iglesia, y que están el Patronato, las señoras que viabilizan el funcionamiento de esa escuela, donde hay creo que 150 niños recibiendo enseñanza, aparte de algunos más que pudieran haber de la población; pero partiendo de la base de que hay 150 niños en esa escuela, que se llama “Nuestra Señora de la Caridad” y que está atendida por unas monjitas, ellas también lo han solicitado.

Yo no he tenido tiempo, señor Castro, de hablar previamente con el jefe de operaciones; pero en el caso nuestro la Cruz Roja habla primero con cualquiera de los dos. Es decir, yo le planteo a usted esto porque es con quien estoy hablando primero, y después entonces lo comunicaré al jefe de operaciones, indistintamente, nosotros estamos con uno o con otro, y en este caso yo les quiero comunicar que, posteriormente a nuestra conversación -y tendré que ir a ver al jefe de operaciones- ya con la conformidad de ustedes si fuera necesario que este convoy para San Luis de Jagua en vez de ser uno o dos camiones fueran más, en el sentido de que estas señoras que constituyen el Patronato, me han ofrecido que ellas están dispuestas a recoger, a viabilizar el envío de mercancías y de comestibles, para esa escuela. Y entonces como que sale un convoy que tiene que pasar por El Cristo aprovecharíamos el que llega hasta El Cristo uno queda allí y el otro sigue para San Luis de Jagua. Dígame si eso está correcto. Lo escucho.

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Muy bien, Teniente Coronel Cossío del Pino. Ya con las palabras anteriores en que le expresábamos que la Cruz Roja Cubana encontraría todas las facilidades de nuestra parte para atender en cualquier lugar y bajo cualquier circunstancia tanto un bando como otro, tanto una población civil de una parte como de la otra, está de más nuestra aclaración. No obstante le ratificamos esos puntos concretos que usted citó, o sea, los dos convoy: el que va para el Colegio de monjitas en El Cristo, y el que va para el hospital de San Luis de Jagua, en Songo, encontrarán, indudablemente, todas nuestras facilidades; incluso se le aconseja que para ambos lugares lleven la mayor cantidad posible de comida, sobre todo para el de los enfermos por encontrarse en lugares muy próximos a nuestras líneas de combate, y pudiera dificultarse el suministro de víveres. Es decir, que en esos casos específicos, como en cualquier otro que usted tenga a bien llevar a cabo, no es necesario, incluso, consultarlo, aunque para más seguridad deben tratar siempre de hacerlo. No obstante se cursarán instrucciones a todas las Unidades Militares subordinadas a este Segundo Frente y a las que operan al margen de esta, las proximidades de Santiago de Cuba, para que dejen transitar libremente, y dándoles todas las facilidades, los convoy de la Cruz Roja.

Es decir, que deben llevar bien claros los distintivos de la Cruz Roja con banderas, con la bandera propia de su institución. Es decir, sobre eso está todo aclarado. Le pasamos el cambio por si sobre el tema tiene que añadir algo más.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- Perfectamente entendido, señor Castro, y nuestros convoy, tanto los camiones que llevan comestibles, como la ambulancia que va de la institución, llevarán los distintivos para que ustedes los conozcan inclusive a distancia. De manera que eso está correcto y yo voy a comunicarme con esta señora del patronato de la escuela, con el Director del hospital, y decirle que está viabilizado todo el problema para que ellos puedan hacer el envío de esas mercancías.

Sr. Castro: con respecto a las entregas o a la recepción del personal del que hemos venido hablando, yo quisiera conocer a qué hora, poco más o menos, debemos estar nosotros en San Luis, o en Dos Caminos de San Luis, para que allí nos reciba la persona que ustedes han de designar, para poder nosotros salir de aquí con el tiempo suficiente para estar allí cuando ya se facilite la operación de la recepción de ese personal. Yo quisiera que usted me informara a qué hora usted cree que puede estar ya en condiciones de ser recibido el personal para que coincida perfectamente sin demoras ni molestias la llegada nuestra allá y la recepción de ese personal. Si usted tiene una idea sobre eso yo le ruego que me aclare…

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Muy bien, Teniente Coronel. Sobre la hora, estamos dispuestos a concurrir a la que usted estime conveniente. En Dos Caminos pueden seguir avanzando con los ómnibus, según me informan, hasta un punto denominado “Bella Lisa” ya dentro del territorio libre de Cuba, hasta ahí más o menos podrán llegar los ómnibus, hasta un punto denominado “Bella Lisa”. No obstante, en Dos Caminos se le tendrá -a la hora que usted indique, a la hora que más les convenga a ustedes- un oficial de enlace, que en este caso será el Cmte. Antonio Enrique Lussón, jefe de la Columna 17, y jefe militar de la zona, el cual podrá avanzar con ustedes hacia donde lo permita el camino. Y de aquí para allá irá un oficial de enlace de esta comandancia central, que será el Capitán Manuel Piñeiro, que irá con los tripulantes y los pasajeros del avión. Así podrán encontrarse y hacer el acto de la entrega de esos ciudadanos; es decir, que sólo queda aquí aclarar la hora que más le convenga a usted para la entrega.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- A mí me parece que sería mejor en las horas de la mañana; si es posible eso, que ustedes tengan el personal preparado, para evitar las horas más calurosas en una espera para el personal y para los mismos que van a acompañar en ese acto de entrega. De manera que, si a usted le parece, el convoy de la Cruz Roja puede estar en Dos Caminos de San Luis, digamos, a las 9 de la mañana; si le parece correcta esa hora, la confirmamos.

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Muy bien, muy bien nos parece esa hora. Es decir que a las 9 A.M. del lunes ustedes llegarán, se encontrarán allí con el Comandante Lussón, que será el oficial de enlace en esa zona, con el cual podrán avanzar hacia Bella Lisa con los ómnibus, donde esperará el Capitán Manuel Piñeiro, Delegado de esa comandancia central, con los pasajeros y tripulantes del avión. Es decir, que a esa hora -lunes a las 9:00 a.m.- pueden darse cita allí. Le pasamos el cambio por si tienen algo más que añadir.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- Señor Castro: acompañando el convoy de la Cruz Roja yo había solicitado, y él me ha brindado su cooperación como compañero, al Tte. Coronel Jorge Caballero, que ha llegado de La Habana en la mañana de hoy; él es Tte. Coronel de la Cruz Roja, adscrito a la Dirección General. Entonces, él ha actuado en las dos veces que hemos estado en la Sierra, y tiene no solamente experiencia y práctica, sino disposición.

Le digo esto, porque yo voy desde por la mañana temprano, tan pronto salga el convoy, a ver si el jefe de operaciones me deja situar en el sector de radio de ellos para poder estar al tanto de cómo va el convoy hasta que pase la línea del ejército, y después cómo va regresando, para yo en cualquier dificultad que pudiera haber, tener mayores facilidades para tratar de resolverla, aunque yo espero -con el favor de Dios- que nada ha de suceder. Pero le explico el motivo por el cual yo no voy a ir, sino que va a ir el Tte. Coronel Jorge Caballero, que es con el que debe entrevistarse para todo esto el señor Lussón.

Es decir, que yo no voy personalmente, porque me parece que puedo ser más útil en cualquier momento estando al tanto del desarrollo de cómo va y cómo regresa ese convoy. Yo creo que es más razonable, porque me será más fácil resolver cualquier motivo, no solamente una incidencia bélica, sino cualquiera otra cuestión. Es decir, yo prefiero estar aquí en contacto para conocer el trayecto de ida y vuelta. De modo que el Tte. Coronel Jorge Caballero sería el que lleva la representación de esta jefatura y de la Cruz Roja, para la entrega y recepción de ese personal.

De modo que si está correcto así yo le ruego me lo ratifique para continuar.

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Muy bien, muy bien lo que dice usted. Es decir, que el Tte. Coronel Jorge Caballero será el que vendrá encabezando la comisión de la Cruz Roja Cubana, y entonces usted permanecerá en Santiago de Cuba siguiendo el curso del convoy.

Entonces, díganos si va a estar en alguna planta, porque incluso para hacer mejor las cosas -a idea nuestra- usted podía estar en una planta por allá y nosotros en esta planta por aquí, y al mismo tiempo estar en contacto, y así con más facilidad pudiera resolverse cualquier tipo de problema que surgiera. Es decir, que ese mismo día de la entrega, a partir del lunes a una hora que determinemos, o a las 9 de la mañana, o antes, estaremos en contacto ya, usted por esa planta o por la que estime conveniente, y nosotros por ésta, y mientras se van desarrollando los acontecimientos podemos estar al tanto de los mismos.

Así que sobre esa idea le pasamos el cambio, a ver qué opina.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- Yo le explicaba que yo le voy a solicitar al jefe de operaciones a ver si es posible que yo pueda estar en la sección de radio de ellos, en el propio regimiento, porque eso facilita las comunicaciones de los puestos militares. Entonces, si no hay inconveniente alguno, o si lo hubiera de cualquier forma, puede reportar aquí a esta planta, que esta va a estar al tanto hasta que retorne el convoy. Pero si surgiera alguna dificultad yo creo que me es más fácil y más rápido a mí resolverlo estando yo en el regimiento específicamente para esa función, ya que si hay algún reporte que hacer y lo trasmiten, yo trataré de comunicar; y si recibe esta planta aquí, por la que yo estoy traduciendo, me podrá comunicar cualquier acontecimiento. De manera que a mí me parece que a los efectos de una comunicación en los distintos puestos yo debo situarme allí, porque respecto a interrupciones de alguna índole en el territorio se estima que usted las resuelve, las que puedan surgir del lado de acá corresponde a las Fuerzas Armadas resolverlas; y conociéndolas yo del lado de acá, pues tengo más facilidades por la proximidad de que eso pueda resolverse. Si está así correcto, o bien si usted quiere que yo me sitúe aquí -a mí me es lo mismo-; yo lo decía por las facilidades que pudiera haber en la solución de cualquier problema.

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Está muy bien lo que usted dice, Tte. Coronel; es decir, que usted estará en la planta del regimiento y nosotros aquí, así que cualquier cosa ya sabe dónde localizarnos. Le paso el cambio a ver si hay algo más sobre el particular.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- Yo quisiera darle entrada ahora a un asunto: la Compañía volvió a preguntarnos si la tripulación del día 21 de Octubre, de acuerdo con lo que hablamos esta mañana, que usted trataría de que estuvieran ahí por si había tiempo suficiente hasta el lunes, o estarán en condiciones también de encontrarse en ese acto, y entonces resolver la determinación personal que se haga, pero ellos quieren saber si van a tener la facilidad de si quieren ser evacuados. Si sobre este particular usted no puede contestar pasamos al otro asunto.

CMDTE. RAÚL CASTRO.- Tte. Coronel Cossío del Pino: el día 10 a las 9:00 de la mañana, en el lugar de la cita, se encontrarán las dos tripulaciones completas para que ellos libremente determinen en presencia de ustedes y del Delegado de la Compañía de Aviación si deciden regresar o quedarse aquí en el Territorio Libre de Cuba. Es decir, pueden contar como cosa segura que estarán presentes el día de la cita.Es decir, que le pasamos el cambio para ver si hay algo más.

TTE. CORONEL COSSÍO DEL PINO.- Ok, recibido perfectamente. Muchas gracias.

Juan Carlos [Raúl Castro Ruz]:

Yo proponer canje Carrasco Artiles-Borbonet [Nelson Carrasco Artiles - Enrique Borbonet].

Yo pensar exigir respuesta antes tú soltar prisioneros. Si Dictadura rechazar nosotros no soltar nadie y yo hacer gran campaña.

Yo tener buen plan.

Fidel Noviembre de 1958

En la reunión del central Oriente, Fidel estuvo acompañado por Vilma, Raúl, el comandante del Batallón 18 rendido en Jigüe, José Quevedo, extrema izquierda, y otras personas.

SÁBADO 08

RADIO REBELDE: Noviembre 8 de 1958.

Instrucciones para todos los comandantes rebeldes en la provincia de Oriente, sobre el tránsito en esta provincia:

1.-El tránsito por ferrocarril debe continuar totalmente paralizado.

2.- El tránsito de ómnibus también debe quedar paralizado.

3.-Puede permitirse el tránsito de pasajeros por carretera, en automóviles y vehículos pequeños solamente los lunes, martes y miércoles.

4.-Puede permitirse igualmente el transporte de víveres y mercancías en general por carretera, los lunes, martes y miércoles.

5.-Puede permitirse el abastecimiento de leche a las ciudades, sin obstáculo alguno, todos los días de la semana.

6.-Debe brindársele facilidades a los cosecheros, y almacenistas de café, para transportar sus productos durante los tres días de la semana, señalados para el tránsito general.

7.-El abastecimiento de petróleo, gasolina y cualquier otro combustible debe impedirse por completo. Todos los carros-tanques que transporten combustible cualquier día de la semana, deberán ser requisados o destruidos.

Se advierte a todos los vehículos y transportes civiles, el peligro de moverse en las carreteras convoyados por tropas de la dictadura, ya que los carros que conduzcan soldados, pueden ser atacados en cualquier parte de su recorrido, vayan solo los vehículos militares o vayan convoyando vehículos civiles.

Se advierte igualmente a los ciudadanos, el peligro de viajar en carros donde vayan soldados de la dictadura, ya que nuestras fuerzas no pueden permitir que los mismos, transiten impunemente escudados en civiles, y en consecuencia, se podrá disparar contra todo hombre uniformado o portando armas largas que transite en cualquier vehículo.

Esperamos de la población el máximo de cooperación con las medidas dictadas.

Estas instrucciones regirán hasta nueva orden. Fdo: Fidel Castro

Comandante Jefe

El comandante jefe de la columna 9 Antonio Guiteras ha remitido el siguiente radiograma: Dr. Fidel Castro Ruz, comandante jefe del ejército Rebelde.

Comandante: Pláceme informarle que estuve en el reparto Vista Alegre anoche a las once y treinta penetrando con una compañía de nuestra poderosa columna 9 Antonio Guiteras. Nuestros hombres han recorrido con verdadera satisfacción hermosas calles de la esbelta ciudad y del bonito reparto Santiaguero. Me acompañaron los capitanes José Antonio [Miguel Ángel Ruiz], Narciso Lara [Rosendo Lugo] y Cabrera [Francisco Cabrera González].

Numerosas familias expresaron admiración por el ejército rebelde. En nuestro afán de encontrarnos con los modernos carros micro-ondas que acostumbraban a recorrer la ciudad a todas horas llegamos al cuartel de San Juan, dimos vivas a la Revolución, y finalmente tuvimos que hacer algunos disparos al aire pues no apareció el enemigo.

Estamos organizando la retirada a los acordes del Himno nacional que cantan nuestros compañeros de la columna No. 9 Antonio Guiteras. Los soldados de Batista no han disparado un solo tiro. Imaginamos que tal vez estén pensando que no vale la pena arriesgar la vida para defender tanta desvergüenza.

De Ud. atentamente,

Comandante Hubert [Huber] Matos, jefe de la columna 9 Antonio Guiteras

RADIO REBELDE: Noviembre 8 de 1958

La toma del pueblo de Alto Songo y la rendición de las diversas guarniciones que lo defendían después de cinco días de combate, constituye una de las más señaladas victorias del ejército rebelde.

Alto Songo no es un pueblo aislado en medio de montañas; es un próspero poblado que está situado a unos minutos de Santiago de Cuba por carretera o ferrocarril. No se tomó por sorpresa; se le asedió y atacó sistemáticamente durante cinco días, reduciendo sus defensas una por una. Fué una batalla en regla donde nuestras fuerzas salieron victoriosas.

La impotencia de la tiranía para socorrer a sus tropas sitiadas, y batidas por los rebeldes hasta obligarlas a rendirse, demuestra su debilidad ante el vigor creciente de la Revolución.

Alto Songo no estaba desguarnecido, lo defendían casi un centenar de soldados enemigos fuertemente atrincherados. Las tropas rebeldes que rodean a Santiago de Cuba impidieron por completo el envío de refuerzos. Al Moncada apenas le alcanzan sus fuerzas para defenderse a sí mismo. Mal podía tratar de salvar el cuartel de Alto Songo, menos podía hacerlo el puesto de mando de Bayamo que el día 3 de Noviembre, en el momento álgido de la batalla de Alto Songo, despertó a las tres de la mañana bajo el fuego de nuestros morteros 81, que causaron estragos, confusión y espanto en el corazón mismo de la jefatura de operaciones enemigas.

Songo tomado, la Granja de Bayamo atacada con fuego de morteros, el Aeropuerto de Manzanillo bajo un ataque similar, cien hombres de la columna 9 paseando por las calles de Vista Alegre, mientras fuerzas de la columna 14 hacían otro tanto en la ciudad de Holguín, donde a pocos kms. el día anterior la compañía 3 y el pelotón de Mujeres Rebeldes “Mariana Grajales” habían destruido una tropa enemiga ocasionándole 20 muertos, 3 heridos, 6 prisioneros y ocupándoles 27 armas largas. ¿Quién iba a pensarlo hace apenas un año, cuando los rebeldes estaban confinados a los más abruptos rincones de la Sierra Maestra? ¡Cómo avanza la Revolución, cómo se hace más fuerte e invencible el ejército rebelde!

Antes eran ellos los que lanzaban ofensivas y trataban de cercar a nuestras fuerzas. Mil veces dijeron que no quedaban más que grupos dispersos. El que fuere en otros tiempos confiado y todopoderoso ejército de la dictadura, se bate en retirada en todas partes, ahora son ellos los acosados y los cercados por las fuerzas rebeldes. Ahora son ellos los arrinconados, los que no pueden ya moverse apenas de un sitio a otro. En las carreteras los que registran más frecuentemente son las patrullas rebeldes. Los confidentes, los esbirros y los soldados con licencia, tienen que andar muy cuidadosos vestidos de civiles y escondiendo sus carnets en las suelas de los zapatos, para no venir a parar a las prisiones rebeldes o comparecer en Consejo de Guerra por sus fechorías y crímenes. ¡Cómo cambian las cosas! Y todavía son tan descarados que se atreven a celebrar unas “elecciones” en esas condiciones y rellenar cientos de miles de boletas en una provincia, donde no fué nadie a votar; pero así irán pagando, una por una, las consecuencias de sus errores interminables.

¡Pobres soldados del ejército de la República! ¡Cómo los han engañado, a qué crítica y desesperada situación los están llevando! Ahora cuando los rebeldes tienen tomadas todas las carreteras y no hay cuartel en toda la provincia que pueda sentirse seguro de no ser atacado en cualquier instante del día o de la noche, cuando no hay transporte militar que pueda caminar un Km. sin el peligro de ser volado por una mina de cien libras, estaría bueno que cada soldado se parara delante de sus jefes que hace apenas unas semanas, después de los desastrosos reveses que sufrió la tiranía en la Sierra Maestra, declararon que ya no había rebeldes, que habían acabado con todos o con casi todos y que no quedaban más que unos grupitos dispersos y en fuga. Para no dejar una sola vez de ser unos desvergonzados sin pudor alguno, cuando los comandantes Ernesto Guevara y Camilo Cienfuegos se abrían paso por las llanuras de Camagüey hacia las Villas, ese mismo Estado mayor le dijo a sus soldados que se trataba de grupos que iban huyendo de la Sierra Maestra. Así, soldados de la República te engañan miserablemente, te utilizan como carne de cañón y en el afán de ocultarte la verdad y abusar de tu lealtad llegan hasta el crimen de no advertirte los peligros que estás corriendo, como si les importara poco que tú, y cientos de tus compañeros, caigan abatidos, por sorpresa, si te diera por creer en los partes de Un Estado Mayor que te dice que ya no hay rebeldes cuando la guerra está tocando precisamente a las puertas de los cuarteles.

Soldado de la República: pregúntale a tus jefes qué pasó en Songo; pregúntale dónde están los soldados que inútilmente le defendieron durante cinco días sin recibir refuerzos; y pregúntate a ti mismo si cualquier día, esa puede ser también tu suerte.

Sierra Maestra

Nov. 8, 58

Curunó [Braulio Curuneaux]:

La trípode mejor no la traigas. Ven tú con tu escuadra. Trata de estar por aquí rápido.

Fidel Castro Ruz [firma]

RADIO REBELDE: Noviembre 8 de 1958

Editorial del New York Times sobre las elecciones.

El periódico New York Times en un editorial sobre la farsa electoral del 3 de Noviembre publicado en el día de ayer, ataca duramente la mascarada, diciendo entre otras cosas, que las elecciones en Cuba no han sido más que una ficción, y que la dictadura de Batista ha sobrepasado a todas las dictaduras latinoamericanas. Esas elecciones, dice el New York Times no pueden ser consideradas por el Pueblo Cubano ni por el norteamericano como unas elecciones verdaderamente democráticas.

Con frecuencia escribía crónicas, partes militares y comentarios para ser trasmitidos por Radio Rebelde. A veces no había tiempo y hacía notas y precisiones de mi puño y letra en las copias mecanografiadas.

nov-8- 2º Frente

¡Qué desvergonzado es el Estado Mayor del Ejército! Hace unos días hablamos de esto. Señalábamos la torpe política de engañar a sus propios soldados. Nada menos que en estos momentos en que las fuerzas de la dictadura están bajo el impacto de una tremenda acometida rebelde que continúa desarrollándose con toda intensidad, ascendiendo ya a 14 el número de cuarteles rendidos, un cable internacional publica lo siguiente:

La Habana Noviembre 8, United Press.

El cuartel General de la dictadura en la provincia de Oriente anuncia hoy en un comunicado que 244 rebeldes han muerto por acciones casi continuas en el curso de las últimas 48 horas en el área comprendida en Santiago de Cuba, Alto Songo, El Cristo, etc. Informaba el ejército que esa lucha era consecuencia de una ofensiva iniciada el 4 de Noviembre contra los rebeldes.

¿Ofensiva contra los rebeldes y no habían sido capaces de enviar un solo soldado a socorrer a sus compañeros sitiados en más de una docena de cuarteles? ¿Qué dirán de esta noticia los cientos de soldados que han sido hechos prisioneros en los cuarteles rendidos? Pero sobre todo, ¿qué dirán de esta noticia los soldados de la guarnición de Santiago de Cuba que a estas horas deben [de] saber lo ocurrido a las guarniciones de Alto Songo, Baltony, Soledad, y otros cuarteles tomados mientras ellos permanecían impotentes? Los primeros que no creen en los partes del Estado Mayor son sus propios soldados. Esto es lo peor que puede ocurrirle a un ejército porque daña su moral de lucha y siembra el desconcierto. Pero lo más criminal de estos partes del Estado Mayor es que atenta contra la seguridad de sus propios hombres. ¿Cómo es posible decirles a los soldados que ya no hay rebeldes, que los han exterminado en el instante mismo en que los rebeldes interceptan las vías de comunicación y cercan los cuarteles?

La guerra exige un estado de alerta constante, para evitar sorpresas, descuidos y errores. ¿Cómo puede pedírsele a un soldado que esté alerta, si se le informa que el enemigo ha sido destruido? ¿Cómo puede evitarse que una tropa o un oficial incurra en los mismos errores que haya costado desastrosas consecuencias a otra, si el Estado Mayor oculta las derrotas a sus soldados y oficiales? Esto es sencillamente criminal. ¿Será tal vez porque como a cada soldado se le paga a fin de mes un miserable sueldo la dictadura piensa que puede disponer a su antojo de sus vidas? Desde el punto de vista rebelde lo que a nosotros conviene es que el Estado Mayor siga mintiendo y cometiendo errores. Militarmente eso nos beneficia. Pero cabe preguntarse: ¿Hasta cuándo soportarán los soldados ese juego criminal con sus vidas? ¿Pueden los soldados tener confianza en jefes que tratan de engañarlos constantemente?

En lo que toca al Pueblo, sí que no engañan a nadie. El Pueblo lee los partes del Estado Mayor al revés. Y con cuánta razón: aquí mismo tenemos el ejemplo: este parte publicado por el cable habla de 244 rebeldes muertos, tal dato coincide exactamente casi con las bajas sufridas por la dictadura los últimos diez días entre muertos y prisioneros.

Ya los soldados pueden acostarse a dormir. Ya no hay rebeldes. El Estado Mayor acabó con ellos.

De izquierda a derecha, el doctor Bernabé Ordaz, el comandante Raúl Castro Ruz, el doctor Julio Martínez Páez y el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.

DOMINGO 09

Mensaje radial enviado a Raúl el 9 de noviembre:

Mandé instrucciones a [Eddy] Suñol y [Delio Gómez] Ochoa.

Aprovechar desventaja enemigo pero no apurar demasiado.

Yo necesitar tiempo coordinar resto provincia. Preparar plan cerco Mayarí y Guantánamo y esperar órdenes. No convenir precipitar.

Enemigo poder escapar provincia.

[... ] primeros 15 días Noviembre.

Ser fácil desembarcar costa noche barco rápido. Desear también saber si existir posibilidad contar expedición hijo Alemán aquí.

Sierra Maestra Nov. 9, 58

Horacio:

Parece que debido precisamente a los tres días que estuvimos sin comunicación el viaje fué suspendido, pero anoche recibí otro mensaje comunicándome la fecha. Dice así el mensaje:

Alemán listo paracaídas lunes a martes mantener campiña encendida de 9 a 10. Encender radiofaro desde 8 y ½. Confirmar este mensaje hoy.

Yo no sé lo que quieren decir con la palabra paracaídas. En el mensaje anterior también aparecía esta palabra. Pienso en la posibilidad de que en vez de aterrizar con el avión, lancen las armas en paracaídas sobre el campo.

De todas formas tú tienes que prepararlo todo mañana lunes y pasado mañana martes, como si fueran a aterrizar.

No queda más remedio que encender las luces de 9 a 10 como ellos piden. Fíjate que no es Pedro Luis [Díaz Lanz], sino Sansón, que una vez se perdió. El radio-faro debes echarlo a funcionar desde las 8 y 30.

Otra cosa, Horacio: las armas y balas que lleguen mándalas con toda urgencia para acá, pues estamos en un minuto muy importante y los acontecimientos parece que se van a precipitar. Tenemos que mover equipos y hombres con mucha rapidez.

Yo creo que esta vez sí llega el avión. Yo anoche mismo contesté que todo estaba listo para el lunes y el martes y que las luces estarían encendidas de 9 a 10.

Saludos, y mucho éxito.

Fidel Castro Ruz [firma]

P. D. Te voy a mandar este mismo mensaje por otra vía para asegurarlo.

Dime si te quedaste con un aparato de radio. Eduardo [Fernández] todavía no los ha entendido bien y creo que eso va a tardar algo.

En previsión del cerco a Santiago de Cuba en el momento oportuno envié una carta a Almeida donde -como aviso- le adelantaba la clave. La señal por radio sería: Realice urgente plan W-3-10-9.

Sierra Maestra, Noviembre 9 de 1958

Querido Almeida:

Te mando diez mil balas; son cinco mil de 30-06 [30.06] y cinco mil de M-1. De esas diez mil, le mandas cuatro mil a Hubert [Huber Matos]; dos mil 30-06 [30.06] y dos mil M-1; las otras seis mil las distribuyes entre las columnas 3 y 10. Te doy un consejo y es que esas seis mil balas las guardes para el momento más necesario. Si se las das a la gente las tiran. Es una vieja experiencia.

Tengo la impresión de que los acontecimientos se pueden precipitar de un momento a otro. Yo estoy tomando medidas rápidamente para cortar totalmente la entrada o la salida de la provincia. Raúl [Castro Ruz] está llevando con éxito una serie de operaciones que van más aprisa de lo que yo pensaba, pero de todas formas es correcto que él aproveche estos instantes de anonadamiento del enemigo para rendir todos esos pequeños cuartelitos que se habrán ido quedando aislados en su zona.

Se está acercando el momento de realizar el plan de que te hablaba en mi anterior instrucción. Yo soy partidario de realizar las operaciones de cerco no en una ciudad o sector determinado, sino en toda la provincia para evitar por completo el envío de refuerzos en la mayor parte de ellos y asegurar su rendimiento. Tienes que ir estudiando tus planes para cuando llegue el momento de iniciar el cerco cerrado de Santiago como parte del plan general. Pero ese momento puede surgir repentinamente. Yo te voy a dar una palabra clave, para en caso de que no haya tiempo de comunicártelo por escrito recibas por radio la orden.

La orden en clave será esta:

“Mensaje al Comandante Almeida: Realice urgente plan W-3-10-9″.

Plan W-3-10-9 es cercar estrechamente Santiago de Cuba con las fuerzas de las tres columnas (3-10-9) y no dejar salir ni entrar a nadie en la ciudad, al mismo tiempo que ir cerrando el círculo más y más hasta encerrarlos en sus instalaciones militares y presionarlos hasta que se rindan, lo mismo resistan una semana que un mes. Los detalles tácticos de la operación te corresponde estudiarlos y decidirlos a ti.

Voy a tratar de que Raúl [Castro Ruz] no se adelante demasiado, pero la necesidad de iniciar las operaciones puede surgir en cualquier momento.

Debes ir pensando las medidas que vas a adoptar cuando Santiago de Cuba caiga. Entre otras cosas tienes que procurar que las armas no se vayan a desperdigar. Todo el mundo va a querer agarrar un fusil y va a ser un problema tremendo. La medida adecuada es ordenar depositarlas, tomar las más indispensables para los hombres que se los hayan ganado y esperar órdenes sobre el resto. Ten presente que en estas situaciones las operaciones se suceden ininterrumpidamente y los hombres una vez alcanzado un objetivo hay que moverlos inmediatamente hacia otro.

Yo estoy esperando a ver si cuaja cualquier gestión de las que estamos haciendo para que se nos una alguna tropa. Apenas ocurriera algo de eso no podríamos esperar más, habría que iniciar de inmediato las operaciones envolventes.

En esencia: hay que estar preparados porque en cualquier momento la Provincia se convierte en una Sierra Maestra en grande.

Tú con un poquito de suerte puedes hasta pescar un general.

Abrazos,

Fdo. Fidel Castro Ruz

Comandante Jefe

Sierra Maestra 11/9/58

Querido Huber:

Recibí tu carta de Octubre 23 aunque gracias al radio he ido recibiendo también noticias tuyas casi a diario. Me preocupa sin embargo, que un fuerte sistema de interferencias esté obstaculizando mucho las comunicaciones. Fué un golpe formidable el combate del Cristo por el momento en que se produjo y es tremendo efecto psicológico que tiene que haber producido en el enemigo. Es realmente magnífico el esfuerzo que están haciendo los hombres de esa columna y tengo en la misma una gran confianza.

Se aproxima el momento de convertir la provincia de Oriente en una Sierra Maestra Grande. Hay que adelantar todo lo posible la preparación de la operación de ustedes sobre la ciudad de Santiago; sobre esto le hablo a Almeida hoy.

Esa posición tuya es de extraordinaria importancia no solo con respecto a Santiago, sino también como contención de todo refuerzo enemigo a Guantánamo y demás guarniciones que colaboran muy estrechamente.

Le di a Almeida la siguiente contraseña para el caso de que los acontecimientos se precipiten y haya que iniciar el asedio cerrado contra la guarnición de Santiago hasta rendirla.

Mensaje al Comandante Almeida:

Realice urgente Plan W-3-10-9

Este mensaje lo enviaré yo por radio si las circuns-tancias obligasen a actuar rápidamente.

Plan W-3-10-9 es cercar estrechamente Santiago de Cuba con las fuerzas de las tres columnas (3-10-9) y no dejar salir ni entrar a nadie en la Ciudad, al mismo tiempo que ir cercando el círculo más y más hasta encerrarlos en sus instalaciones militares y hostigarlos hasta que se rindan, lo mismo resistan una semana que un mes.

Los detalles tácticos de la operación corresponden resolverlos a ustedes. El objetivo de la operación en gran escala en toda la provincia es copar en este extremo de la isla al grueso de las fuerzas enemigas. La operación de cerco y rendición de guarniciones se realiza con mucha más seguridad cuando en vez de emprenderse aisladamente se lleva a cabo al mismo tiempo en el mayor número posible de puntos, impidiendo así el envío de refuerzos que en todo caso si el enemigo hace un gran esfuerzo, servirá solo para librar algunas tropas pero no a todas. Calcula por ejemplo qué habría ocurrido en Las Mercedes si Estrada Palma, Yara, Manzanillo, Bayamo y Holguín hubieren estado cercados al mismo tiempo.

Raúl [Castro Ruz] se está adelantando un poco y necesito tiempo para terminar de preparar y coordinar las operaciones en el resto de la provincia; pero es correcto por parte suya aprovechar el anonadamiento de las fuerzas enemigas para hacerle el mayor daño posible en su zona. Ayer, sin embargo, me pidió solicitase de [Delio Gómez] Ochoa el bloqueo de la carretera Holguín-Cueto, para evitar llegaran refuerzos a Cueto. Solicitaba esa ayuda con carácter urgente, envié instrucciones a Suñol y Ochoa en ese sentido comunicándole la petición sin empleo de clave pues eso no estaba preparado; lo que al mismo tiempo produce desplazamiento de tropas nuestras hacia un punto distinto del que estaba planeado debilitando momentáneamente nuestras líneas entre Oriente y Camagüey que es la garganta donde debemos estrangular al enemigo.

Hace falta de todos los comandantes una perfecta coordinación y que cada cual dé el máximo de sí mismo pues nos aproximamos a una etapa decisiva.

Te envío vía Almeida dos mil balas 30-06 [30.06] y dos mil balas M-1; recomiendo no las repartas, sino en el momento más necesario. Tenemos que adaptarnos a nuestro escasísimo parque.

No me has dicho si recibiste los cinco mil pesos que ordené se te remitieran desde Santiago.

Un abrazo a todos,

Fidel Castro Ruz

Comandante Jefe

Sierra Maestra Nov. 9, 58

Estimado Crescenciano [Agustín Tomé, coordinador del Movimiento 26 de Julio en Camagüey]:

No tengo noticias de esa Provincia desde su última carta. Lamentablemente por radio no hemos podido hacer comunicación y las comunicaciones por carretera ya debe usted suponer cómo andan.

Siento mucho que la hora en que le escribo estando a punto de partir el portador quien no puede esperar, por la necesidad de estar en Manzanillo a fecha fija, no me permita tratarle extensamente una serie de cuestiones que por su carácter requieren analizarlas a fondo. Tendría que escribirle largas horas para expresarle todas las preocupaciones que tengo respecto a Camagüey.

El médico vino y me habló de las cuestiones que usted insinuaba en su carta. El resultado de los informes recibidos de allá es uno: preocupación. Nace esta de la impresión que tengo de una serie de puntos de vista que se apartan de las realidades de esta guerra y además se desentienden de los problemas futuros de la revolución. Todo lo que escuché sobre planes de adquisición de armas revelaban una gran inexperiencia sobre las dificultades y las características de esas operaciones; una tendencia a creer en promesas e informes que en la inmensa mayoría de los casos resultan falsos e impracticables.

Para no ir muy lejos en busca de ejemplos baste citar uno relativo a algo sobre lo que ustedes por la proximidad era de presumir que conocieran bien: las seguridades que me dió el compañero Z. [Ricardo Lorié, Zoilo] de que ahí se podrán adquirir armas y balas, lo que me reiteró con mucha fe ante las insistentes indagaciones y preguntas mías. Todo resultó una ilusión y todavía a estas horas no he tenido explicación clara de ello.

La cuestión es que basado en los informes de Z. ordené retener ahí los diez mil pesos recogidos y luego usted me escribe que iban a ser remitidos a Miami. Nada de extraño tendría que otro tanto ocurriera con los informes sobre armas que reciben de Miami, un poco más lejos.

Pero hay además, otra cosa: con mucho trabajo y solo gracias a poder encontrar por fin hombres realmente capacitados logramos organizar un departamento de abastecimiento de armas con que abastecernos directamente después que el Movimiento había malbaratado más de trescientos mil pesos con delegados que no lograron traernos un solo fusil. Después que hemos resuelto al fin aunque muy modestamente ese problema, cuando hemos logrado poner un poco de orden en cosa tan importante y discreta ¿qué necesidad tenemos de introducir la anarquía en ese departamento e iniciar la compra de armas por la libre, que aparte de todos los inconvenientes de falta de organización y disciplina, fracasos posibles, etc. puede poner en peligro la discreción y seguridad de lo poco que hemos logrado hasta ahora? Las gestiones que usted ha estado haciendo con elementos de otras organizaciones para fines de carácter bélico y de abastecimiento de armas sobre las que he recibido tardías noticias con carácter de contactos consumados y proyectos por realizar en días determinados no me preocuparían gran cosa, y hasta estaría dispuesto a comprender el natural deseo de reunir lo que tanta falta hace: armas, si no viera con justificada aprehensión el peligro de que por no tener las cosas bien aclaradas, advertidas, estudiadas y planeadas, Camagüey se vaya a convertir en un caos de organizaciones, mandos, jefes y jefecillos como Las Villas. Yo que tengo derecho a conocer el valor de la disciplina y la coordinación en una guerra, sé que doscientos hombres bien identificados hacen mucho más que cinco mil que no se entiendan y con los que no es posible realizar ni confiar en la realización de ningún plan, y que hay cosas que en una guerra no se pueden sacrificar por ninguna cantidad de armas.

Tengo entendido que usted realiza gestiones de carácter personal y valiéndose de su crédito privado para reunir una determinada cantidad con que llevar a cabo esos proyectos. No pueden haber en una organización dos clases de planes: unos como miembro de la misma y otros como asuntos privados. Un miembro de una organización y mucho menos un dirigente, no puede hacer proyectos de carácter privado pensando que lo justifica el hecho de respaldarlo con sus recursos personales. ¿Qué sentido tiene hacer eso? Si el plan es bueno, se propone a la Organización. Si la Organización lo acepta, en ello deben invertirse los recursos de la misma. ¿Cómo puede darle usted una explicación correcta a la búsqueda privada de diez mil pesos para adquirir armas para esa Provincia, cuando el Movimiento tiene cientos de miles de pesos?

Cuando yo decidí enviar a esa provincia una cantidad de hombres armados, no hubo necesidad de que se mandara aquí un solo centavo previamente, ni tampoco se requirió para enviar otro número de hombres armados a reforzar la primera columna. Los mandé cuando creí que hacían falta. ¿Qué obsesión es esa de adquirir armas para Camagüey? ¿Quién le ha dicho a nadie que los planes y la distribución de armas tenga algo que ver con los sentimentalismos personales? ¿Considera usted que por ejemplo, tiene lógica mandar armas en un momento dado a una provincia cuando en otra puedan ser necesarias para una batalla decisiva que aporte a la revolución en conjunto un saldo mucho mayor? El envío de armas a una provincia determinada se hace de acuerdo con un plan determinado. Los planes en una guerra los concibe y ejecuta un determinado organismo de mando, no es cosa que deba decidirse por capricho o por personales deseos o deseos de una localidad determinada. ¿No le parece a usted por ejemplo que en el momento en que el enemigo desató su gran ofensiva en la Sierra Maestra hubiere sido un disparate tener nuestras armas regadas por toda la isla? No se hubiera podido ocupar entonces una sola arma, ni habría hoy dos columnas en las Villas y una fuerza en esa provincia. Yo me tomo con gusto el trabajo de razonarle sobre estas cosas, pero para mí por lo que he sufrido y he pasado en dos años soportando las consecuencias de los errores de muchos, constituyen cosas elementales.

Anda todo regular por Camagüey y la impresión que dejan las cosas de esa provincia son negativas: las mentiras de Medina, la indisciplina de [Jaime] Vega que condujo al desastre, la poca claridad de sus dirigentes sobre una serie de cuestiones esenciales de la revolución, el localismo que se observa en la mentalidad de los compañeros responsables, las vacilaciones ante ofrecimientos de armas que por su procedencia había que rechazarlas sin el menor parpadeo, la tendencia a desconocer el sentido de la organización y la disciplina, el modo superficial con que deciden sobre cuestiones que requieren experiencia y cuidado y la liberalidad con que interpretan sus prerrogativas. El portador me refiere una conversación del Dr. J. con él al tratarle los proyectos que tenían concebido, argumentándole que para realizar los mismos podían contar con los ochocientos mil pesos que se iban a recaudar en los ingenios. Si en materia de armas y de guerra, se consideraban con derecho a decidir, nada tenía de extraño que ya estuviesen pensando en disponer de los fondos como si no hubiera que rendirle cuentas a nadie. Añado a esto el hecho, de que habiéndose remitido a la Sierra Maestra desde la Habana, quinientos uniformes, para hombres que en muchos meses y acaso años, no se habían puesto un uniforme nuevo, la Sección de Abastecimiento o la persona responsable del envío desde Camagüey a la Sierra, sin contar con nadie reparó y retuvo en esa ciudad doscientos uniformes completos, para la tropa de Camagüey y aquí mandó ciento y tanto pantalones de uniforme, sin camisas, que fué todo lo que llegó a la Sierra Maestra, del único envío de uniformes que se nos había hecho en dos años. Se privó a las tropas que no tienen acceso a los centros de abastecimiento de doscientos uniformes, para dejarlos a una tropa, que ni siquiera había llegado a ese territorio, que no pasaban de cincuenta bien armados y a los cuales se les pudo hacer ropa con tela adquirida en esa ciudad. Eso, que hizo una persona responsable del Movimiento, no lo hubiera hecho ninguno de los ciudadanos que desde esa provincia han donado cosas para estos combatientes, conscientes de nuestras necesidades.

Yo espero que Ud. analice con honestidad lo que le escribo en esta carta. No son todavía siquiera todas las preocupaciones que me invaden con relación a Camagüey. Ojalá que con un máximo esfuerzo de todos, principalmente de usted en esa provincia comience a borrar la impresión mala de las últimas semanas. Ojalá que todo comience a marchar mejor y que usted se compenetre con el Jefe de nuestra tropa y lo pueda ayudar a vertebrar las fuerzas bajo el signo de la disciplina y el más elevado espíritu revolucionario. Quiera Dios, que elementos ajenos al 26 de Julio no le introduzcan factores de anarquía, con todos los peligros que en ese sentido entrañan las consecuencias del desastre de Vega y el no haber podido enviar a esa provincia algunos de nuestros jefes más experimentados. Al menos el capitán [Víctor] Mora es un hombre valiente y combativo, pero ustedes tienen que ayudarlo a organizar el territorio e impulsar el espíritu de disciplina, de administración eficiente y de responsabilidad.

Sobre el proyecto del avión le expresará al piloto mi punto de vista.

Espero noticias amplias de usted.

Y le deseo que no se deje llevar de la impaciencia. Tal vez pronto podamos dedicar a la liberación de esa provincia el grueso de nuestras fuerzas. Lo saluda,

Fidel Castro Ruz [firma]

El Che en Cabaiguán, el 22 de diciembre de 1958, después de fracturarse el brazo izquierdo durante el ataque a ese poblado.

Sierra Maestra Nov. 9. 1958

Se asciende al capitán de Milicias, Ángel Ameijeiras que cayó combatiendo heroicamente frente a los esbirros de la tiranía. En homenaje a su ejemplar conducta revolucionaria, a su incansable espíritu de lucha y al heroísmo con que se batió durante horas con las fuerzas mercenarias del tirano, sin importarle el número del enemigo, prefiriendo morir antes que deponer las armas, el Ejército Rebelde le concede el grado de Comandante, que es el más alto de nuestra jerarquía militar.

Fidel Castro

Comandante-Jefe

RADIO REBELDE

¡ÚLTIMA HORA!

¡Atacado el pueblo y la granja de Bayamo, sede de la jefatura de operaciones del ejército enemigo en horas de la madrugada del día 3!

¡Una batería de morteros 81 bate el puesto de mando enemigo!

Repetimos…

Informes llegados a la planta del llano rebelde y remitidos a la comandancia general, comunicaban que todos los indicios de un gran combate se estaba desarrollando en la madrugada del día 3 en la ciudad de Bayamo; que en la ciudad se escuchaba un intenso tiroteo, mientras que en la Granja de Bayamo, sede del puesto de mando enemigo podían escucharse a gran distancia el estampido de los morteros 81 y el tronar de cañones; eran señales evidentes de que el comandante Delio Gómez Ochoa al mando de la columna 32 José Antonio Echeverría del ejército rebelde, apoyado con fuego de mortero 81, estaba cumpliendo su cometido.

De las ciudades de Holguín, Manzanillo, Victoria de las Tunas sobre las que estaban operando otras columnas rebeldes, no se ha recibido todavía información alguna.

DECLARACIÓN DE LA FEDERACIÓN ESTUDIANTIL UNIVERSITARIA

Después de la mascarada electoral continuista, del títere [Andrés] Rivero Agüero, que sólo ha servido para corroborar hasta la saciedad, el rejuego politiquero más insólito en nuestra era republicana, denunciada por esta Radio Rebelde día a día, y que solo ha servido para reafirmar aún más la fé de un pueblo en su determinación de ser libre, sentando las bases de un verdadero y definitivo proceso revolucionario.

Inesperadamente nuestra hora radial Alma Máter en Miami, conjuntamente con la del 26 de Julio, fué clausurada. Ya la despreciable censura de Prensa la sufrimos los cubanos hasta en el extranjero…

Pero queda esta Radio Rebelde, como vehículo inexpugnable de orientación y denuncia. Y desde aquí, esta Federación Estudiantil Universitaria, hoy en estas montañas históricas, al lado del inspirador y guía del glorioso Movimiento 26 de Julio, Fidel Castro, denuncia: El continuismo y su secuela; el rejuego injerencista de la dictadura y su contubernio con el tramitado Embajador Smith, con un esfuerzo inútil de impedir el triunfo de la revolución. Nos enfrentaremos a todos los intentos de los retrógrados y enemigos sistemáticos de la revolución cubana, a todas las fuerzas: internas o externas, que tal cosa pretendan. Aquí está, victoria tras victoria del Ejército Rebelde -en la que ya se destaca la Columna “José Antonio Echeverría” en el ataque a Bayamo- que nos hace confiar en una pronta victoria final y no cejar ante ninguna fórmula, que no sea el triunfo definitivo de nuestros postulados revolucionarios, en la que ya hemos demostrado hasta la certidumbre, la resolución adoptada por nuestro pueblo, dispuesto a hacer uso de la fuerza, para conquistar sus derechos conculcados: hasta vencer o morir.

POR LA FEDERACIÓN ESTUDIANTIL UNIVERSITARIA. TERRITORIO LIBRE DE CUBA

Juan Nuiry Sánchez

Omar Fernández Cañizares

y José Fontanill Castillo

Nov. 9 de 1958.

Sierra Maestra

RADIO REBELDE

A LA OPINIÓN PÚBLICA Y LAS FUERZAS ARMADAS. Declaraciones de Nuestro Comandante Jefe Dr. Fidel Castro Ruz.

Antes de ayer a las ocho y treinta de la noche, esta Comandancia estableció comunicación por Radio con el Teniente Coronel de la Cruz Roja Cubana, Oscar Cossío del Pino, solicitando de ese Organismo, trasmitiera al Estado Mayor enemigo, el canje del Teniente Coronel del Ejército, Nelson Carrasco Artiles, prisionero de nuestras fuerzas, por el Comandante [Enrique] Borbonet, preso en Isla de Pinos.

El Teniente Coronel Nelson Carrasco Artiles fue herido en combate y hecho prisionero por Tropas de la Columna Tres, hace varias semanas. Recientemente, a petición de sus familiares, la Cruz Roja Cubana solicitó y obtuvo permiso del mando Rebelde para visitarlo y llevarle medicinas. El Teniente Coronel Carrasco Artiles había recibido varias heridas pero nuestros médicos lograron salvarle la vida.

Los rebeldes siempre hemos dispuesto la libertad de los soldados y oficiales de baja graduación sin condición alguna ni solicitar nada en cambio de ello, reteniendo únicamente como prisioneros a los oficiales de alta graduación.

Por tratarse en el caso de Nelson Carrasco de un oficial herido cuyo restablecimiento total estaría mucho más garantizado en un hospital dotado de todos los medios modernos, hemos considerado humano facilitarle esa oportunidad por medio de un canje. Y al mismo tiempo, que la dictadura pueda brindarle a uno de sus altos oficiales que fué herido en combate los servicios del más completo tratamiento médico, es justo que recobre también su libertad un oficial del Ejército de los que están presos hace más de dos años por oponerse a la Tiranía.

No proponemos el Canje del Tte. Coronel Carrasco Artiles por el Coronel [Ramón] Barquín por ser éste oficial preso de mayor graduación que aquél, y la dictadura pudiera alegarlo como pretexto para rechazar el canje.

En consecuencia se propone el canje del Teniente Coronel Carrasco Artiles, no por un oficial de mayor graduación, ni siquiera por un oficial de la misma graduación que él, sino por un oficial de menos graduación, el Comandante Borbonet a quien el Pueblo de Cuba conoce por sus valientes y cívicas declaraciones en el Consejo de Guerra que lo condenó a injusta prisión.

Otros 120 soldados prisioneros están a punto de ser puestos en libertad por el ejército rebelde, lo que elevará a 700 el número total de soldados y oficiales enemigos que han estado prisioneros de nuestras fuerzas desde que comenzó la guerra, cuyas vidas han sido respetadas, tratados con toda consideración humana y devueltos al seno de sus hogares, de donde lamentablemente, en muchos casos la dictadura los ha llevado de nuevo al combate y a la muerte.

Por primera vez después de poner en libertad un número tan extraordinario de prisioneros enemigos, se propone el canje de un Teniente Coronel que está herido y asistido en un hospital rebelde, por un adversario de la tiranía preso. La dictadura tiene ahora la palabra. Los familiares del Teniente Coronel Carrasco Artiles esperarán con ansias la respuesta que permitiría el regreso al hogar de un allegado por cuya suerte han vivido angustiados interminables días.

Nada cuesta a la dictadura remediar esa angustia en la familia de uno de los suyos que cayó herido en el cumplimiento de sus órdenes. No podría, por cierto, remediar en nada el dolor de los familiares de los soldados y oficiales que han muerto. Sin embargo, en este caso sí puede. Carrasco Artiles aunque herido está vivo, y en manos de sus compañeros de armas [pueden] devolverlo al seno de su familia y del ejército. Para ello no tendrían que hacer daño a nadie; simplemente algo tan sencillo como justo: poner en libertad a otro militar, que está preso sin razón en las prisiones de Isla de Pinos. Borbonet no es un soldado rebelde. Borbonet es un comandante del ejército que compartió durante muchos años con esos mismos oficiales que continúan ostentando en el cuerpo armado las mismas insignias y emblemas que él ostentara. Borbonet se graduó en la Academia Militar; compartió allí con otros jóvenes cadetes sus sueños de gloria y de servicio a la Patria. Hace más de dos años y medio que está preso junto con otros militares dignos.

Ante este canje no hay alternativa para el mando enemigo.

La dictadura no puede ser tan cruel, insensible y torpe que dejándose llevar por el odio y la soberbia prefiera dejar abandonado a un alto oficial de su ejército permitiendo que continúe herido en un hospital rebelde, sólo por no acceder a libertar a otro oficial del ejército de la República, encarcelado por el propio régimen.

¿Qué explicación podría darle a los familiares del militar herido? ¿Qué explicación podrá darle a los familiares de los demás militares que con razón pueden pensar que ese mismo, cualquier día, puede ser su caso? ¿Qué explicación podría darle a los propios soldados, compañeros de Carrasco Artiles que están combatiendo contra los rebeldes?

¿Le parecería todavía a la Dictadura demasiado poco tiempo el que lleva en prisión el digno Comandante Borbonet y sus compañeros, como para no brindarle una oportunidad de curarse a uno de sus propios oficiales que ella ha sacrificado en el campo de batalla?

Tan innoble, cobarde e impolítico sería rechazar este canje, que ni aún un régimen como éste que ha sido capaz de tantas ruindades y traiciones podría llegar a esos extremos.

El teniente coronel Carrasco Artiles será ingresado en el Hospital Militar de Columbia con sólo abrir las puertas de la prisión de Isla de Pinos al Comandante Borbonet y entregarlo a la Cruz Roja para su traslado al territorio libre.

Imposible que el Estado Mayor de la Dictadura no acepte. Ningún ejército del mundo puede hacer semejante agravio a un oficial herido en combate. No habría soldado ni oficial que después de eso se sintiera con ánimo para seguir combatiendo.

Nuestros médicos le salvaron la vida a Carrasco Artiles, ahora corresponde a la Dictadura lograr su completo restablecimiento y su inmediata libertad.

Fidel Castro Ruz

Comandante Jefe

9 de noviembre de 1958

RADIO REBELDE.

ÚLTIMA HORA: Tomado el cuartel de Soledad por las tropas rebeldes. Ocupadas 29 armas largas y miles de balas. Hecha prisionera su guarnición. Informes recibidos desde el segundo frente Frank País comunican textualmente lo siguiente: El día siete de noviembre fuerzas rebeldes de la columna Seis al mando del comandante Efigenio Almejeira [Ameijeiras] y el capitán Samuel Rodiles después de siete horas de combate tomaron el cuartel de la guardia rural de Soledad. Fueron ocupadas 29 armas largas, 17 fusiles spring fields, una ametralladora española calibre 30, dos carabinas San Cristóbal con sus respectivos peines, cinco fusiles garand, 30 cananas, dos escopetas calibre 16, 10 revólveres calibre 45, una pistola calibre 38, una pistola de nueve milímetros, diez granadas de mano, un fusil, una planta eléctrica de 32 voltios, y 3,125 tiros, de distintos calibres. Fue hecha prisionera toda su guarnición, compuesta de 29 hombres, entre ellos un sargento y dos cabos. Por nuestra parte sólo tuvimos dos heridos graves. (Fdo.) Comandante Raúl Castro Ruz.

El Segundo Frente Frank País resultaba indetenible en su empuje ofensivo de estas semanas. Una tras otra se rendían a sus fuerzas las guarniciones enemigas. Esperábamos el momento oportuno para que el grueso de sus combatientes en acción aunada con los del Primero y Tercer Frentes lanzaran ataques decisivos.

Radio Rebelde

ÚLTIMA HORA: Cae también el cuartel de Barton en poder de las tropas rebeldes. Se rindió su guarnición. Ocupadas numerosas armas.

La Comandancia General del Segundo Frente Oriental, Frank País, informa también que el cuartel de Barton ha caído en poder de las fuerzas rebeldes y hecho prisionera su guarnición, ocupándosele las armas, en la forma que detallamos a continuación: Soldado Antonio Rondón Sola, se le ocupó un springfield y un revólver 45; soldado Julián Guillermo Martínez, se le ocupó un springfield; soldado Manuel Durán, se le ocupó un springfield y una granada de mano; soldado Eugenio Quintanilla, se le ocupó un springfield y una granada de mano; soldado Godofredo Tomás Rodríguez, se le ocupó un springfield y un revólver 45; soldado Augusto Rodríguez Alpízar, se le ocupó una ametralladora San Cristóbal con cuatro magazines; soldado Fernando Regalado Fuentes, se le ocupó un springfield; soldado José Rolando Batista, se le ocupó una ametralladora calibre 30, un revólver 38 y una granada de mano; soldado Roberto Amador Prieto, se le ocupó un springfield; soldado Carlos Cruz Iglesias, se le ocupó un springfield; soldado César Medero Sánchez, se le ocupó un springfield; soldado Segundo Téllez Rodríguez, se le ocupó una ametralladora San Cristóbal con cinco magazines, y un revólver calibre 45; soldado Eustaquio Ramón Batista, se le ocupó un springfield y dos granadas de mano.

Continúa la ofensiva rebelde, ascienden ya a catorce los cuarteles que han caído en poder de nuestras tropas.

Hemos recibido hoy el siguiente parte de la Comandancia General. Las columnas rebeldes del segundo frente Frank País, han tomado catorce cuarteles enemigos en los últimos días. Los partes de guerra de la comandancia del Segundo Frente, con las listas de las armas ocupadas, prisioneros de guerra y demás detalles de las acciones, mantienen ocupados todo el día a los operadores de nuestra estación de radio-comunicación. Pasan ya de doscientos cincuenta los soldados enemigos que han caído prisioneros.

Un número que se aproxima a doscientas setenta armas ocupadas. Las tropas de la dictadura, que iban tomando alzadas en numerosas guarniciones pequeñas, fueron abandonadas a su suerte. El estado mayor de la tiranía, ni siquiera intentó salvarlas. Uno a uno sus cuarteles se van rindiendo a discreción, en algunos casos, después de varios días de inútil resistencia.

La ofensiva rebelde tiene anonadado y paralizado al enemigo, y las vías de comunicación están interceptadas por nuestras fuerzas. El ataque victorioso de nuestras tropas, ya es incontenible. La resistencia enemiga se desmorona ante el empuje del frente Número Dos, mientras el grueso de las tropas rebeldes que integran [el frente los frentes] uno, tres y cuatro esperan las órdenes oportunas para lanzar sobre el enemigo ataques decisivos.

Fidel Castro Ruz, Comandante Jefe.

Fidel imparte instrucciones en la Comandancia de La Plata.

LUNES 10

Mensaje al Comandante [Delio Gómez] Ochoa:

Los Cuarteles de Cueto y Guaro cayeron ya en poder de los Rebeldes, muévase usted hacia la zona que se le señaló al partir de la Sierra Maestra y ordene al Capitán Suñol esté listo para apoyarlo a usted con todos sus hombres.

Comunique a todas las fuerzas de ese frente que han caído 14 cuarteles en poder de los Rebeldes los últimos días y que las fuerzas de la dictadura se están desmoronando.

Todas las fuerzas al mando de usted deben estar listas para cumplir su objetivo básico tan pronto reciban la orden.

Fidel Castro

Raúl:

Estoy [de] acuerdo contigo. Ayer envié instrucciones por escrito a Almeida y Huber poniéndolos alerta.

Sigue tú presionando paulatinamente.

[Los] Acontecimientos [se] están desarrollando muy rápidamente. ¿Te has adelantado un poco?

Pero vas bien. TE TRANSCRIBO ORDEN QUE DI HOY A OCHOA. Fidel

Soldado batistiano bajo arresto en la Sierra Maestra.

MARTES 11

Sierra Maestra Nov. 11, 58 10 a.m. Luis [Pérez]: Voy a realizar una operación importante y necesito

el apoyo de esa columna con la que espero mejorarte y aumentarte el armamento. Tienes que hacer un esfuerzo para reunirte conmigo en el punto que te indicará [Reinaldo] Mora; él vendrá con ustedes. Trae las minas, los cables y detonadores. Vamos a ver si para el sábado estamos juntos. La tropa no debe saber hacia dónde se dirige.

Saludos Fidel Castro Ruz [firma]

Sierra Maestra Nov. 11, 58. Lalo [Eduardo Sardiñas]: Parece que los acontecimientos se están precipitan-

do mucho más rápidamente de lo que pensábamos. Raúl [Castro Ruz] ha lanzado una gran ofensiva en el Segundo Frente y hasta el día de ayer habían tomado 14 cuarteles y ocupado 270 armas aproximadamente y unos 250 prisioneros, apenas sin bajas por parte nuestra.

Debes estar muy atento de la situación porque [en] cualquier instante se puede producir el desmoronamiento, y sea necesario cortar por ahí todo intento de evacuación enemiga. Esa es tu misión principal. Procuraré tenerlos informados de la situación por radio rebelde.

Yo voy a salir hoy de la Plata para una operación importante. Si sale bien, mando refuerzos rápidos para esa.

No he recibido más armas. Saludos Fidel Castro Ruz [firma]

Había partido de mi puesto de mando en Cuatro Caminos, el día 9 de noviembre. Mil reclutas habían sido prepara­ dos en las duras condiciones de Minas de Frío. Pedí me enviaran, si mal no recuerdo, 100 hombres desarmados para que me acompañaran.

Como vanguardia llevaba el pelotón del teniente Orlando Rodríguez Puertas.

Antes recibí noticias de que una compañía del Ejército de Cuba, menos un pelotón, había decidido po­ nerse a nuestro lado. Entregaban las armas, conserva­ ban su carácter de soldados profesionales y los grados de oficiales. Les hicimos esa propuesta, a través del comandante Quevedo, cuyo batallón fue obligado a de­ poner las armas en la Batalla de Jigüe en la última ofen­ siva batistiana en la Sierra Maestra.

Otras unidades se proponían hacer lo mismo, por ello partí rápidamente hacia el poblado de Minas de Bueycito, que fue sede del experimentado batallón de Sánchez Mosquera, el más cruel y temido de las tropas enemigas.

No habíamos atacado aquella unidad, simplemente la hostigábamos de vez en cuando. Sí le tenía cortada la retirada con una pequeña fuerza rebelde, en el camino hacia el llano. Ese era el momento de exhortarlos a con­ versar, llegar a un acuerdo y pedirles que entregaran sus armas. Para nosotros era muy importante avanzar hacia Guisa (mapa p. 548), defendida por las fuerzas élites de Bayamo, que disponían de tanques pesados, livianos y vehículos blindados; por esa razón escribí en términos respetuosos un mensaje al capitán que se encontraba al frente de ese puesto para que depusiera sus armas como ya lo habían hecho otras unidades del Ejército al sumarse a la revolución. No habríamos tenido que invertir 10 días en la Batalla de Guisa. ¿Qué impidió nuestro propósito? Una pequeña fuerza al mando de un teniente rebelde era la que debía cerrar el camino hacia Bayamo, apoyados por Curuneaux con 12 hombres.

Miguel Aguilar, que iba al frente del pelotón estaba ya en camino, por delante de nuestra tropa. Lo primero que hizo cuando llegó mi carta donde él se encontraba, el jue­ ves 11 de noviembre por la mañana, fue redactar otra de su puño y letra que era una grosería, con la cual acompañó la mía, enviada en un sobre cerrado. El capitán al leer la de Miguel que iba abierta, se negó, con toda justificación a leer la mía, según le comuniqué después a Faustino Pérez. El incidente fue resultado de una chapucería más, fruto de la autosuficiencia que tanto he criticado siempre. En ese momento, yo tampoco podía ya retroceder. Esa noche dormí en la amplia casa deshabitada de un político y la­ tifundista ausente, en las proximidades de la guarnición que defendía a Guisa, a pocos kilómetros de las tropas éli­ tes del Ejército instaladas en la ciudad de Bayamo.

Al día siguiente, golpeamos a aquella fuerza y se inició la desigual batalla que tal vez no habría tenido lugar si la carta que reproduzco a continuación hubiera llegado sin percance a su destino.

[Carta dirigida al jefe del Batallón 24 del Ejército de la tiranía, ubicado entonces en Minas de Bueycito, presumiblemente, el capitán Díaz Calderín]

Sierra Maestra Nov. 11, 58 11 p.m. Señor Capitán: He ordenado cortar la retirada a esa tropa, pero con instrucciones de no disparar, sino comunicarse con usted para ponerlo al tanto de esa situación.

Esta medida obedece al hecho de que varias unidades del Ejército se han sublevado y unido a la revolución, por lo cual con toda seguridad la tiranía llena de temor y desconfianza ordenará retirar esa tropa, lo cual no podemos permitir; primero: por razones de orden militar, que usted comprenderá perfectamente, y segundo porque deseo tener una entrevista con usted para invitarlo a que secunde [a] los valientes compañeros suyos que se han unido al pueblo.

Lo que no deseo, de corazón se lo digo, es que se dispare un solo tiro entre sus hombres y los rebeldes.

Al tomar nosotros los caminos, usted puede comunicar que está sitiado, y entonces que sea el mando militar quien venga a combatir si lo desea, lo cual dudo, pues en estos instantes numerosas fuerzas están cercadas.

Nosotros queremos tener en consideración su trato decente y generoso con los vecinos de ese abnegado pueblecito de las Minas que tanto ha sufrido el terror y la represión de la tiranía.

Escarbe ahí y verá que dondequiera encuentra huesos de algún infeliz asesinado.

¡Busque [a] alguien [que a quien] no le hayan arrancado un ser querido!

¡Ojalá que las tristezas de ese vecindario donde tanto luto y dolor ha sembrado el tirano, lo hagan meditar a usted en la nobleza y razón de nuestra causa!

En nombre del honor verdadero, de su deber hacia Cuba y sus compatriotas, reciba la mano que le tendemos caballerosamente.

Con un saludo lleno de fraternidad, queda de Ud. Fidel Castro Ruz [firma]

Preparando bombas rústicas en la Sierra Maestra

MIÉRCOLES 12

Sierra Maestra Nov. 12, 58 Horacio [Rodríguez]: ¡Qué cosas tú tienes! Cuando vi eso creía que me

habías mandado algún invento o cosas por el estilo. Así es como tú me agradeces la caja de tabacos que te

mandé. El avión lo cogieron cuando iba a salir. Fué mala suer-

te; pero llegó una noticia mejor: ingresaron dos pelotones completos con sus armas. Tú lo habrás oído. La cosa va fenómena. Sigue esperando ahí pacientemente el poco tiempo que queda. Te haremos jefe de un aeródromo grande cuando cojamos a Oriente.

Abrazos Fidel Castro Ruz [firma]

Los médicos René Vallejo y Manuel Piti Fajardo en el hospital de campaña de Pozo Azul, Sierra Maestra.

JUEVES 13

Sierra Maestra 11/13/58. Sr. Capitán R. E.S.M. Estimado compatriota: En marcha hacia el encuentro con varios oficiales que

con sus unidades han abrazado nuestra justa causa me alcanza un mensajero urgente del Dr. [René] Vallejo, quien a su vez lo recibió del Sr. Miguel Mesa, expresando la esperanza de que usted y otros militares honorables de esa zona se unan al pueblo en su lucha heroica por su libertad y sus derechos, y que las condiciones morales y humanas de usted y muchos compañeros suyos le dan derecho a ocupar un lugar heroico en la revolución, me detengo un minuto para hacerle estas rápidas líneas.

Por todos los indicios e informes que obran en mi poder la lucha se acerca a un final. Ustedes, los militares más próximos a nosotros, que son testigos excepcionales de la verdad que el Estado Mayor de la Dictadura trata de ocultar al propio Ejército, son los que dando un paso al frente pueden decidir la contienda, ahorrado Dios sabe cuántas vidas de compañeros suyos y nuestros.

Hay infinidad de militares descontentos, pero les resulta sumamente difícil agruparse para realizar una acción decisiva. Por otro lado, si logran vertebrar una pieza determinada y se lanzan a una acción en los cuarteles, conduciría inevitablemente a un choque entre militares que debe evitarse. Por eso el camino más efectivo, más seguro y menos sangriento es que los oficiales, clases y soldados descontentos se trasladen al territorio libre a confraternizar con nosotros y pedirles desde aquí a sus compañeros que cese la guerra, resistiéndose a seguir defendiendo un régimen criminal y odioso.

Los militares honorables, que son muchos, no deben por ningún concepto seguir cargando el peso que un grupito reducido de hombres despiadados y sin escrúpulos están lanzando sobre ellos. Es justo que salven ante la historia de su patria su honor y su derecho a seguir contando con estimación de sus conciudadanos.

Los militares no deben venir a combatir, porque no creemos ni queremos que deba promoverse esa lucha. La inmensa mayoría de los soldados, clases y oficiales del Ejército son hombres capaces de reaccionar patrióticamente y es posible que muy pronto el Ejército en masa se una a la revolución. De ahí el valor extraordinario que tienen los primeros militares que den el ejemplo.

No puedo darle datos concretos sobre las unidades que se sublevaron porque recibí un mensaje en clave del Comandante Quevedo, por radio, informándome que serán dos tenientes [Rodolfo Villamil y Ubineo León, en Charco Redondo] y dos pelotones completos con sus armas y parque, estando en espera de otras unidades.

Tanto el Comandante Quevedo, como los capitanes Durán [Batista] y [Victorino] Gómez Oquendo, que fueron prisioneros nuestros y han podido comprender toda la justicia de esta causa, el espíritu fraternal de los revolucionarios con los militares, unido al olvido del Estado Mayor, que trató además de difamarlos calumniosamente tratando de hacer caer injustamente sobre ellos la culpa de las derrotas, cuando en realidad fueron abandonados a su suerte y combatieron con extraordinario valor en circunstancias totalmente adversas, están hoy entregados de lleno a despertar en sus compañeros de armas el sentido del deber de todo militar con su pueblo y con su patria, convencidos además de que el Ejército no debe seguir comprometiéndose con los errores de la Dictadura.

He propuesto también el canje del Coronel Carrasco Artiles por el Comandante Borbonet, pero hasta este momento no hemos recibido respuesta.

Tenemos el propósito de organizar la Columna Militar de la Revolución. No se tratará pues de rebeldes, sino de militares, que como tales lucharán también contra la tiranía, pero de la forma más efectiva, sin combatir con las armas, sino invitando al Ejército a unirse a ellos. Esta es la idea sobre la que está girando nuestro plan en relación a los militares. Cuando una gran parte del Ejército piense así, no habrá que disparar un tiro más, pues la camarilla que oprime al país no esperaría un minuto más para escapar del poder.

Si usted se decide reúna a todos los hombres de su unidad en los que pueda confiar y estoy seguro de que será una mayoría (bastará con que usted les hablase con emoción y decisión) y póngase en marcha hacia acá con el portador de esta carta que le servirá de vanguardia, y camine hasta encontrarse conmigo.

Que traigan sus armas y todo el parque posible. Conserve esta carta que le sirva de salvoconducto.

En el trayecto trate de hacer contacto con el compañero Crescencio Pérez que es Comandante de la zona para que le brinde facilidades y orientación hacia el lugar donde yo me encuentre. Todos sus hombres deben traer sus armas hasta encontrarse conmigo y de acuerdo con los demás militares decidir los próximos pasos.

Con la esperanza de que usted pueda contarse entre los que van a prestarle a la patria en este minuto tan señalado servicio, le expreso mi más ferviente deseo de poderle dar muy pronto un abrazo fraternal.

Te felicito por las proezas que estás realizando. Abrazos Fidel Castro Ruz [firma]

Sierra Maestra Nov. 13, 58

Suñol: Sin leer siquiera los papeles que acaba de entregarme Armando le viro para atrás con dos mil balas 30.06 y quinientas de M-1, pues esta tarde recibí tu carta informándome de tus heridos, así como la del Mellizo, Manolo Díaz que es muy amigo mío (¡cómo… [equivale a cómo diablos]* no me voy a acordar de él!), diciéndome que andabas escaso de parque, lo que también me comunicaba [Delio Gómez] Ochoa. Yo ando en operaciones con todo el arsenal de balas conmigo para atender las necesidades.

No me has dicho si recibiste las 500 balas de M-1 que te mandé anteriormente con [Orlando] Lara.

Supongo habrás escuchado mis instrucciones generales por radio.

A mi entender, debes prestarle a Ochoa el mayor apoyo para que refuerce bien la entrada y salida de Oriente.

P. D. Te mandé un muchacho con un springfield. Es el sobrino de Juan Manuel Márquez [Orestes Quintana]. Con él iba un grupito que lleva mil balas de máuser.

Te mando ahora otras mil más de máuser.

Sierra Maestra Nov. 13, 58 6 p.m.

Sr. Comandante: Recibí el saludo que me envió en su nombre y el de su

tropa, que considero un gesto caballeroso de su parte en medio de esta guerra dolorosa.

Los militares de honor tienen en mí un adversario que sabe reconocer la hombría de bien, aunque hoy nos separe un concepto distinto del deber.

Si revolucionarios y militares pudiésemos hablar de hermano a hermano no se derramaría una gota más de sangre, pero hay intereses mezquinos y egoístas que quieren mantener al militar aislado de su pueblo, como si lo honorable fuera matar compatriotas en vez de confraternizar con ellos. Aunque no se pueden remediar en un día males que tienen raíces viejas, créame que esta pesadilla horrible que está sufriendo Cuba se acerca a su fin.

Sé que la inmensa mayoría de los militares cubanos son hombres dignos que aborrecen lo que está sucediendo. Por eso he tenido tantas consideraciones con los prisioneros, apartándome de toda política de odio o represalia. No los culpo porque los han engañado; les han hecho creer que ese régimen de corrupción, vicio, crimen, fraude, tiranía había que defenderlo.

La fe que puse en la reacción de los militares cubanos está empezando a rendir los más inesperados frutos. Los que creyeron poder llevar a los soldados de la República a morir por una causa odiosa e injusta están a punto de presenciar los más inesperados acontecimientos.

Usted que es un hombre joven y valeroso no se hunda ni arruine su hermosa carrera defendiendo una causa que no es la suya ni de su pueblo. Usted no tiene millones, usted no ha asesinado a nadie, usted es militar y no político, ningún interés tiene en esa comedia repugnante que es la prostitución del sufragio; no tiene por qué sacrificar su vida y la de sus hombres a intereses tan bastardos que no son los de su patria ni de los suyos, como hombre de bien y como militar.

Sea usted también de los primeros militares en abrazar la causa de su pueblo. Una brillante carrera lo espera como Comandante que es a pesar de sus pocos años. Rompa los lazos que lo atan a ese régimen infamante que ya está en el ocaso. Haga lo que han hecho ya otros oficiales que por su gesto merecerán el cariño eterno del pueblo. Y como jefe que es, salve también a sus soldados de la deshonra y tal vez de la rendición y la muerte. Se lo van a agradecer infinitamente el día de mañana, aunque ahora tenga que imponerse. Usted está cerca de nosotros. No tiene más que dar un paso, y no es capaz de imaginarse cuántas vidas ayudará a salvar. Su mejor amigo no le daría un consejo más leal y desinteresado. Escriba junto con nosotros la página más hermosa y prometedora de la historia de Cuba.

Su amigo Fidel Castro Ruz [firma]

[Raimundo] Roselló: Entrega al portador mil balas de máuser. Fidel Castro Ruz [firma] S. Maestra Nov. 13, 58

Noviembre 13

RADIO REBELDE

Por su importancia repetimos las declaraciones de nuestro Comandante-Jefe Dr. Fidel Castro. Última Hora:

Una noticia sensacional. Repetimos. Última hora: Una noticia sensacional. A todos los Comandantes y Jefes de Columna Rebeldes en la provincia de Oriente, Camagüey y las Villas y a la población civil, muy especialmente de la Provincia de Oriente.

Dos dignos oficiales del Ejército al mando de sus respectivas tropas acaban de sublevarse contra la Dictadura y unirse a las fuerzas Revolucionarias en el frente Número Uno de la Sierra Maestra. Trajeron todas sus armas y gran cantidad de balas. Son dos pelotones completos con sus oficiales, clases y soldados, que están ya en camino hacia la Comandancia General. Reina extraordinario júbilo en las filas Rebeldes por esta emocionante noticia. Otras unidades se han sublevado y están también en marcha hacia la Sierra Maestra. Estos hechos evidencian un completo estado de conciencia revolucionaria en las filas de las Fuerzas Armadas. Es este un minuto extraordinario que puede determinar el fin próximo de la Tiranía. Aunque sea necesario todavía luchar muy duramente todo parece indicar que la derrota del régimen es inminente por desesperada que fuese su resistencia final.

El tráfico en la Provincia de Oriente debe quedar paralizado de nuevo totalmente. Todos los hombres y todas las unidades Rebeldes deben estar en sus puestos. Todas las vías de entrada y salida de las ciudades así como de la provincia de Oriente deben quedar cortadas. Las columnas del Segundo Frente Frank País, deben proseguir su avance, cercando y rindiendo todos los cuarteles posibles en la zona comprendida dentro del triángulo Mayarí, San Luis, Guantánamo, mientras las columnas que rodean a Santiago de Cuba deben estrechar el cerco impidiendo el menor movimiento de Tropas enemigas. Las tropas rebeldes que operan en el centro y oeste guardando la entrada de la provincia de Oriente deben combatir con toda tenacidad cuanto refuerzo el enemigo pretenda enviar a la provincia.

Los centros urbanos que caigan en poder de nuestras fuerzas deberán ser declarados ciudades abiertas y en consecuencia ninguna tropa rebelde deberá acampar en ellas para evitar que las ciudades indefensas sean bombardeadas. En este sentido solicitaremos la intervención de la Cruz Roja.

Debe reinar el más estricto orden en todas las circunstancias. Los soldados que se rindan o que se unan a la Revolución deberán recibir el más fraternal tratamiento.

Todo oficial de las fuerzas armadas que desee unir su tropa a la Revolución deberá hacerlo ante los Comandantes y jefes Rebeldes de cada zona. Cada Comandante Rebelde debe poner especial cuidado en que las armas que se ocupen en los cuarteles grandes sean inventariadas y depositadas en lugar seguro en espera de órdenes sobre las formas en que serán distribuidas para armar a los alumnos de las distintas escuelas de soldados revolucionarios, donde están recibiendo entrenamiento en este instante.

Las tropas Rebeldes de la Provincia de Camagüey deben apoyar la batalla de Oriente intensificando el ataque contra los medios de transportes enemigos en Camagüey atacando en su retaguardia a los refuerzos que pretendan enviar a esta Provincia.

Las columnas invasoras 2 y 8 del ejército rebelde situadas en las Villas, recabando apoyo de todas las demás fuerzas revolucionarias que allí combaten deben a su vez interceptar las carreteras y vías férreas para impedir el cruce de tropas enemigas hacia Oriente y evitar que puedan retirarse las que permanezcan junto a la Tiranía y queden combatiendo en este extremo de la Isla donde virtualmente están siendo arrolladas ya por nuestras fuerzas.

El pueblo debe cooperar con el ejército Rebelde todo lo que esté a su alcance. El pueblo debe ser el principal mantenedor del orden en cada ciudad que se libere, evitando que se produzca ningún tipo de saqueo, destrucción de propiedades, o hechos de sangre deprimentes. Nadie debe tomar venganza contra nadie. Los confidentes y los elementos que se hayan caracterizado por sus actos inhumanos contra el pueblo deberán ser detenidos e internados en prisiones para ser juzgados por Tribunales Revolucionarios. En los momentos decisivos que se acercan el pueblo debe dar las más elevadas pruebas de civilidad, patriotismo y sentido del orden para que nadie pueda el día de mañana lanzar imputaciones deshonrosas contra nuestra Revolución que por ser la más elevada conquista de la Nación Cubana y su más extraordinaria prueba de amor patrio y dignidad ciudadana debemos cuidarla de toda mancha.

Saludos, Fidel

noviembre de 1958

Sierra Maestra, Nov. 13, 58

Estimado Pardo [José Pardo Llada]: Se están produciendo acontecimientos que a mi

entender son importantes. Yo tengo hoy, a las 10, una reunión con la Cruz Roja en Providencia y después sigo para encontrarme con los pelotones que se han unido a nosotros (del Ejército) y para atender también una operación militar que puede tener importancia.

Si no tienes ningún otro plan, puedes trasladarte a Providencia tan pronto recibas esta. En dos o tres horas puedes estar allí, si te indican el camino. Tal vez la Cruz Roja esté hasta tarde. Después puedes seguir tras los acontecimientos sucesivos.

No puedo mandarte la cámara, principalmente por no querer soltar la que tengo con todo el apego por ella de un recién aficionado y la quiero tanto como a mi fusil, pero te puede servir para tomar fotos de todos estos temas, con carácter exclusivo y yo puedo ayudarte a tomar escenas sin separarme mucho de ella.

Te envío este papel temprano, con órdenes de que te localicen para ver si puedes llegar pronto. Yo estoy ahora en Santo Domingo y salgo para Providencia. Te llevo sólo unas horas de ventaja.

SOCIEDAD NACIONAL CUBANA DE LA CRUZ ROJA DIRECCIÓN GENERAL DE BRIGADAS LA HABANA ACTA

En Guasimal de Nagua, a los trece días del mes de Noviembre de Mil Novecientos cincuenta y ocho, reunidos el Dr. José Ramón Cruells y Reyes, Secretario General de la Cruz Roja Cubana, y el Teniente Coronel Jorge Caballero y Herrera, Cuartelmaestre de esa Institución, que asistieron en representación de la misma, y de otra parte el Dr. Fidel Castro Ruz, Comandante Jefe del Ejército Rebelde que solicitó la presencia de dichos Delegados, con el propósito de formular determinadas proposiciones a la mencionada Institución, que considera están dentro de sus funciones humanitarias, que concreta los siguientes puntos.

Primero: El envío de una Delegación permanente de la Cruz Roja Cubana a cada uno de los frentes de operaciones, que tendrían por función sugerir y viabilizar cuantas medidas puedan adoptarse a fin de evitar riesgos y daños a la población civil y a cuantas personas puedan ser consideradas como no beligerantes. Que aunque recaba de la Cruz Roja gestione con el Mando opositor la aplicación de medidas similares, esta proposición la hace sin exigir como condición indispensable que tengan que aceptarla ambos contendientes.

Segundo: Que considerando la posibilidad de que en breve plazo caigan en poder de las fuerzas revolucionarias distintos centros urbanos de importancia, en evitación de que los mismos queden expuestos a los riesgos de ataques aéreos que costarían incalculable número de vidas inocentes, propone a la Cruz Roja declarar ciudades abiertas a dichos centros urbanos, renuncia por su parte el Mando Rebelde, a las ventajas de utilizarlas como bases militares ni puntos de acantonamiento de tropas, y que, en consecuencia, las fuerzas rebeldes se instalarían siempre en zonas no urbanas, donde los efectos de los ataques aéreos no expondrían masivamente a la población civil a las consecuencias de los mismos, ya que aunque los ataques aéreos en las zonas rurales producen también víctimas indefensas, nunca lo sería en proporciones tan catastróficas como los bombardeos en zonas densamente pobladas.

Tercero: Que habiendo solicitado la intervención de la Cruz Roja en distintas ocasiones para poner en sus manos centenares de prisioneros enemigos, entre ellos gran número de heridos, quiere hacer constar, que actuando con una falta de reciprocidad absoluta, los enemigos, digo heridos y prisioneros rebeldes son asesinados, como ocurrió en la provincia de Camagüey cada vez que algún rebelde cayó en poder del enemigo, a raíz del cruce de dos columnas por esa provincia, y muy especialmente con el caso de una fuerza rebelde que opera permanentemente en dicha provincia, la cual, los últimos días del mes de Septiembre del presente año, al caer en una emboscada no pudo recuperar once de sus miembros heridos en combate, los cuales al caer en poder del enemigo, fueron trasladados primeramente al hospital del Central Macareño y con posterioridad, cuando eran trasladados en camiones de dicho punto al pueblo de Santa Cruz del Sur, sus escoltas, al mando de un comandante de apellido Piñeiro y un sargento de apellido Otaño, lanzaron granadas de mano en el interior de los vehículos donde iban los heridos, rematando con ráfagas de ametralladoras a los supervivientes. Afirma igualmente que sin una sola excepción en dicha provincia los rebeldes hechos prisioneros fueron asesinados. Que en ocasión de ello solicitó de la Cruz Roja Internacional, por medio de su Comité en Ginebra, el envío de una Delegación para solicitar del mando enemigo datos, informes y facilidades para la comprobación de los mismos a fin de presentar una denuncia ante la Comisión de Los Derechos Humanos de la O.N.U. [Organización de Naciones Unidas] -que en este caso reitera dicha solicitud por medio de los representativos de la Cruz Roja Cubana, que por su parte está dispuesto este Mando Rebelde, a brindar toda la información necesaria para facilitar dicha investigación.

Cuarto: Que reitera su disposición a brindarle a la Cruz Roja Cubana todas las facilidades en el desempeño de su altruista gestión y ratifica su propósito de seguir realizando una política de guerra civilizada y humana que ocasione el menor costo posible de sangre, para cuyo fin recaba la colaboración de la misma.

Los Delegados de la Sociedad Nacional de la Cruz Roja que concurren a este acto, el Dr. José Ramón Cruells, Secretario General de la Cruz Roja Cubana y el Teniente Coronel de la misma, Jorge Caballero y Herrera, se dan por enterados de las peticiones del Comandante Jefe del Ejército Rebelde, Dr. Fidel Castro, para dar cuenta de las mismas a la Institución a los fines procedentes.

Y para que así conste se firma la presente, en Guasimal de Nagua, a los trece días del mes de Noviembre de mil novecientos cincuenta y ocho.

Dr. José Ramón Cruells Sec. Gral. de la Cruz Roja [firmado en el original]

Dr. Fidel Castro Comandante Jefe [firmado en el original]

Jorge Caballero Herrera Tte. Coronel Cuartelmaestre de la Cruz Roja Cubana [firmado en el original]

[Carta del Comandante en Jefe Fidel Castro al general Eulogio Cantillo, jefe de la zona de operaciones del Ejército de la tiranía en Bayamo]

Señor:

Me comunica el Dr. Cruells sus palabras acerca del Estado Mayor ante mi proposición de canje entre el Teniente Coronel Carrasco Artiles y el Comandante Borbonet.

¿Es posible, General, que el Estado Mayor vea un obstáculo en el hecho que el T.C. Carrasco sea un prisionero en combate y el C. Borbonet un preso juzgado y sancionado por un tribunal de guerra, por cuyo motivo el Ejército renuncia a recobrar a uno de sus altos oficiales herido en combate que necesita mejor asistencia? ¿Cómo es posible entonces, señor General, que el Estado Mayor no haya tenido el menor escrúpulo en que un marinero que asesinó un niño, una joven y una anciana por lo que fué condenado a 140 años se encuentre en libertad dirigiendo en Manzanillo las pandillas de ganster de [Rolando] Masferrer y que con la tolerancia de las fuerzas armadas ejerce funciones de orden públicas y comete toda clase de fechorías? Usted, General Cantillo, que es un hombre sensible ¿cómo puede aceptar que se haga semejante desprecio a uno de sus oficiales heridos en combate? ¿Le puede parecer absurdo, con estas cosas, que hasta el último oficial se una a nuestra causa después de haber esperado inútilmente que hombres como usted que tanta influencia gozaba entre los oficiales jóvenes hicieran algo?

¡Bien, General Cantillo! ¡No importa! Cuando sea definitiva la respuesta rechazando el canje, mande 2 oficiales de su confianza a la S.M. que yo le entregaré al T.C. Carrasco Artiles sin condición alguna, porque más que indignación lo que produce la conducta del mando del Ejército es asco y repugnancia.

Atentamente, F. [Fidel Castro Ruz]

Rendición de los guardias de la tiranía al mando del capitán Sierra Talavera, Palma Soriano, diciembre de 1958.

VIERNES 14

Noviembre 14, 1958.

RADIO REBELDE

Desde la zona de Operaciones de la Columna Uno, nuestro Comandante-Jefe nos envía las siguientes declaraciones:

Para saber la desesperada situación militar de la Tiranía, bastaba escuchar los partes emitidos ayer por el Estado Mayor del Ejército.

Tan tremendo fue el impacto del gesto patriótico de los militares que se han unido al pueblo, y las victorias rebeldes que se están produciendo, unas tras otras con asombrosa rapidez, que el Estado Mayor de la Dictadura en el día de ayer se dió a la tarea de anunciar una serie de partes cuyo contenido peregrino y falso no se le escapa ni al más ingenuo.

Todo el mundo sabe en primer lugar, que los partes de guerra del Estado Mayor de la Dictadura jamás han dicho la verdad. Al revés del mando Rebelde que ha tenido como política de guerra, anunciar la situación militar con absoluta veracidad, no puede decirse que la dictadura haya dicho la verdad una sola vez. No se explica uno, cómo no se cansan, ni se aburren de los mismos partes rutinarios y de las mismas mentiras repetidas con inalterable cinismo. Hablan de muertos rebeldes y no dicen cuándo ni cómo; hablan de armas ocupadas y nunca dicen de qué marca y calibre.

En cualquier combate victorioso, siempre el vencedor recoge en el campo de batalla numerosos heridos. A un número de cifras como dá el Estado Mayor de cientos de rebeldes muertos, correspondería un número similar de prisioneros heridos cuya fotografía, una sola vez, [bastarían bastaría] para dar algún crédito a las noticias de la tiranía. La explicación es clara: la dictadura no ha sufrido más que derrota tras derrota. Sólo en una ocasión, al Sur de Camagüey, recogieron 11 prisioneros rebeldes heridos, y en vez de aprovechar la oportunidad de sacar fotografías y producir aunque fuese una sola vez alguna prueba de sus partes de guerra, los asesinaron estúpida y cobardemente.

El mando rebelde dá siempre el número exacto de bajas enemigas, cantidad y clase de armas ocupadas, número preciso de balas, el nombre de los prisioneros, unidad a que pertenecen, lugar de su residencia, fecha de su nacimiento y cuanto pueda servir para autentificar de manera indubitable nuestros partes de guerra.

Jamás ocultamos nuestras bajas, y damos los nombres de los compañeros caídos siempre que cada Jefe de Unidad incluya ese dato. Nadie absolutamente en Cuba duda por eso de cuanta noticia sobre la situación militar brinda la Comandancia General. Ha sido norma severa y rigurosa, que desde un principio se estableció. Eso nos ha dado ante el pueblo un crédito ABSOLUTO.

Ayer la dictadura habló de más de 200 muertos rebeldes en diversos combates en Oriente. Pues bien: en numerosos combates efectuados sobre todo en la zona Norte de Oriente, que ha costado al enemigo la rendición de numerosos cuarteles y más de 200 prisioneros cuyas generales completas hemos ido dando por Radio Rebelde, no se ha reportado un sólo rebelde muerto, lo que constituye no solo una prueba de superioridad táctica, sino que las tropas de la dictadura están ofreciendo una resistencia muy débil en estos instantes. Por lo que se puede añadir aquello de que: “Los muertos que vos matáis gozan de buena salud”.

Otra noticia de la dictadura, es que un avión de la marina, por motivos de un desperfecto, se vió obligado a aterrizar en territorio rebelde y que éstos, violando la tregua concertada para la devolución de los pasajeros del avión, lo habían ocupado. ¡Qué casualidad tan grande y qué mala suerte la de la dictadura! En primer lugar, si había tregua ¿qué hacía un avión volando sobre territorio rebelde con una ametralladora y miles de balas? ¿Quién en ese caso violaba la tregua? En segundo lugar ¿qué pretenden? ¿que si un avión se vé forzado a aterrizar en territorio libre se lo vamos a devolver lindamente a la dictadura?

Nosotros todavía no hemos recibido detalles pormenorizados sobre el caso de dicho avión: si se vió forzado a aterrizar o se incorporó voluntariamente lo cual no tendría nada de extraño en este momento pero cualquiera que haya sido la causa no puede ser más lastimosa, ridícula y plañidera la versión del Estado Mayor.

Sin embargo, de los partes del día de ayer, lo que produce verdadera risa es la versión que pretendieron dar para explicar el caso de los 2 oficiales de la guarnición de Charco Redondo que con todos los hombres y armas de sus respectivas unidades se unieron a la Revolución. El parte del Estado Mayor afirma, que una patrulla de 20 soldados fue secuestrada por los rebeldes. ¿Pero no es realmente absurdo afirmar que 20 soldados perfectamente armados pueden ser secuestrados tranquilamente? Ni en Cuba ni en ninguna parte del mundo se pueden secuestrar 20 hombres armados. Se pueden matar 20 soldados en una emboscada, pero es imposible capturar una tropa de 20 hombres sin entablar combate. Eso no podría realizarlo ni el mejor ni el más entrenado cuerpo de comandos del mundo. Le hace muy poco favor el Estado Mayor de la dictadura a los soldados de la República, al afirmar que una patrulla de 20 hombres fue secuestrada por los rebeldes.

Los soldados del ejército no tienen nada de cobardes, hemos combatido con ellos muchas veces y sabemos que pueden rendirse por hambre y sed como ocurrió en el Jigüe, o cuando quedan encerrados bajo un fuego mortífero como ocurrió en Santo Domingo, Purialón, El Salto, etc., pero siempre han combatido con valor.

Cualquier militar cubano comprende estos razonamientos sin dificultad alguna.

Esos soldados secuestrados de que habla el Estado Mayor, son los que se sublevaron, y no fueron 20 sino 52 de la Guarnición de Charco Redondo, con dos Primeros Tenientes, todas sus armas, 8 000 balas 30.06 y M-1 y docenas de granadas de mano. ¿Se pueden secuestrar 52 soldados que estaban armados con automáticas y granadas de mano? Todos los datos personales de dichos militares serán publicados por Radio Rebelde tan pronto se reciban completos. Están en marcha hace varios días. La población campesina sale a recibirlos con indescriptible júbilo en todos los caminos, los abrazan y les dan vivas a la revolución y a los militares dignos. Son las primeras unidades completas del ejército que se unen a la Revolución.

El pueblo no halla cómo demostrarles su agradecimiento y sus simpatías, les brinda lo que tiene, les ayuda a cargar su equipaje y los colma de atenciones. Esos militares no vienen a matar campesinos: vienen a confraternizar con su pueblo. Nunca una tropa del ejército en operaciones recibió esa acogida; antes los campesinos huían, escondían todo, informaban a los rebeldes; ahora a esos militares los abrazan, todo se lo brindan y los colman de atenciones. Ese será el cuadro el día del triunfo. El abrazo que en la Paz unirá a los civiles y a los soldados dignos. Porque estos son solo los primeros, detrás vendrán muchos más.

Y tampoco van a combatir contra sus antiguos compañeros de armas. Esos militares vienen al territorio libre a confraternizar con el pueblo, a negarse a seguir sirviendo a la tiranía, a dar el ejemplo a sus compañeros. Ellos no dispararán sus armas contra otros soldados, sino que los invitarán a que también se unan al pueblo y abandonen la tiranía. Saben que esta guerra se puede terminar sin disparar un tiro, basta con que los demás soldados hagan lo mismo que ellos y no habría más sangre ni más lucha entre hermanos.

Pocos ejemplos tan hermosos como este se han dado, en la historia de los pueblos.

No pudieron haber adoptado una actitud más humana y honorable. Si estos militares se hubiesen reunido con otros para poner fin a la dictadura mediante un golpe de estado, al llevarse a cabo, con toda seguridad que hubiese habido choques entre soldados, sangre derramada entre soldados, y eso es lo que no quiere la revolución; por eso no invitamos a los soldados a dar golpes de estado ni a combatir contra sus compañeros de armas, sino a confraternizar con su pueblo, que es el mejor modo, el más digno y emocionante de liberar a la patria sin más sangre.

Bienvenidos al territorio libre, militares honorables, que supieron sentir el dolor de Cuba.

Para ustedes será hoy, mañana y siempre nuestro emocionado reconocimiento, porque supieron saltar el abismo que separa el bien del mal, el honor de la deshonra, la lealtad de la traición; la tiranía de la libertad.

El soldado que abandona las comodidades del cuartel por la vida dura y sufrida del rebelde merece doblemente la gratitud de la Patria.

(Fdo.) Fidel Castro Ruz Comandante Jefe

A mediados de este mes las noticias recibidas desde el Cuarto Frente eran alentadoras y probaban la efecti­ vidad del bloqueo aplicado en la provincia de Oriente por el Ejército Rebelde. A Lara le escribí al respecto y para comunicarle instrucciones cursadas para hacer llegar parque a la tropa de Suñol, entre otros asuntos de interés.

Sierra Maestra Nov. 14, 58

Capitán [Orlando] Lara:

Recibí tus comunicaciones de fecha once que llegaron a mis manos más rápidamente porque el mensajero me encontró en Providencia.

Me parece muy razonable el planteamiento de los ferrocarriles y con ese compromiso de la empresa puede disponerse se emprenda la destrucción sistemática de las vías. Solo de una cosa hay que cerciorarse: que no esté actualmente el sistema ferroviario, principalmente la vía del tren central en condiciones de ser reparado rápidamente y utilizado por el enemigo. En vista del bloqueo establecido por nosotros en la Provincia es importante que esas vías no puedan ser utilizadas para abastecimientos. Aclarado este requisito, no tengo objeción en ofrecerle a la empresa seguridades para sus propiedades. No me parece correcto que le cobremos impuestos, porque hemos excluido de ellos a los medios de transporte, además, la compañía de ferrocarriles ha sufrido muchos daños. Puedes exponerle que de parte nuestra no hay interés en el cobro de impuesto, por los motivos alegados.

Sobre la urgencia de parque de la tropa de Suñol, ayer mismo di instrucciones al muchacho que trajo los prisioneros de virar enseguida con veinte hombres llevando parque para él.

El informe sobre el territorio y de los adelantos en todos los órdenes me pareció muy bueno. [Delio Gómez] Ochoa también me habló encomiásticamente.

Voy rumbo a la Estrella [mapa p. 548]. Estaré por estas zonas los próximos días atento a los acontecimientos.

Saludos a todos Fidel Castro Ruz [firma]

P. D. Comunícale a Suñol por radio que van: 2 000 balas 30.06, 1 000 balas máuser y 500 de M-1, por otro lado 1 000 balas máuser más.

DOMINGO 16

S. Maestra Nov. 16, 58 Nassín [Haddad]: Te ruego le sirvas una factura de nuestra mercancía al

Capitán Ignacio Pérez incluyendo los números de zapatos que él le dirá. Es para una tropa en marcha que encontré cerca de aquí.

Lo saluda Fidel Castro Ruz [firma]

Capitán Orlando Lara, tras la victoria sobre la ofensiva de verano, Fidel le asignó una columna que operó en el Cuarto Frente.

LUNES 17

Sierra Maestra Nov. 17. 58

Sr. Andrés Morales E. S. M. Estimado Señor: Envío al compañero Eduardo Méndez con la misión de hablar con usted y le haga llegar a sus hijos que son militares honorables una exhortación mía a que se unan a la causa justa de la Revolución. Mucha sangre de hermanos ha costado esta lucha, con hombres que caen de uno y otro lado. Es preciso que la tiranía desaparezca. Usted que ha sufrido muy de cerca las desdichas de su patria es uno de los llamados a ayudarnos en esta noble cruzada, para que sus hijos y nosotros no sigamos combatiéndonos.

Lo saluda fraternalmente, Fidel Castro Ruz [firma]

Sierra Maestra Nov. 17, 58

Faustino [Pérez]: Llegué aquí tarde. Los guardias como habíamos supuesto, recibieron la orden de partir. Miguel [Aguilar] que ya estaba en el camino lo primero que hizo cuando llegó el jueves por la mañana fué hacer una carta de su puño y letra, que era una grosería, con la que acompañó la mía que iba en un sobre cerrado. El capitán al leer la de Miguel que iba abierta, se negó con toda justificación a leer la mía.

Lo segundo que hizo Miguel fué retirarse de manera bastante vergonzosa al otro día dejando pasar el refuerzo. El único que hizo resistencia durante 3 horas fué Curunó [Braulio Curuneaux] con 12 hombres.

En consecuencia, los guardias de las Minas se fueron. Fué una chapucería imperdonable. Acabando de salir los guardias llegaban aquí la gente de Luis Pérez, el Mexicano [Francisco Rodríguez], parte de los fusiles de los guardias que se unieron, la tropa de Ignacio [Pérez] y los dos morteros. Gente que vino toda de lugares muy distantes y llegaron puntuales a la cita. Miguel pudo haber rechazado el refuerzo con los sesenta hombres armados que tenía y las bombas contra las tanquetas. A los de las Minas no había que tirarles un tiro; pero al llegar las tanquetas pudieron irse.

Tanto a una tropa como a la otra se le ocasionaron bajas. Pero de esto no vale la pena ni hablar. Las Minas están ya en territorio libre. Quedaba poca mercancía y [me se] dejó casi toda porque es lo único con que cuentan los vecinos de esta zona para los próximos días. Compramos solo latería y otras cosas que no suelen adquirir los consumidores. Si no ocurre hoy algún imprevisto sigo viaje con la tropa reunida a realizar la operación en otro punto. Luego regresaré hacia la zona de Canabacoa según los planes, que desde luego pueden ser modificados de acuerdo con las circunstancias. Todo depende del desarrollo de las operaciones en los demás frentes.

Al fallarme los aparatos de comunicación, estoy desesperado de noticias. Oigo, por suerte, a Radio Rebelde. Ayer recibí el mensaje de Eduardo [Fernández] sobre lo de Gustavo [Arcos Bergnes].

Si llega algo avísale a Horacio lo traslade urgente a las Vegas. Eso es lo que él hará seguramente apenas lleguen las armas. Una vez allí, le dices a Aldo [Santamaría] que envíe una tropa escogida cuyo número debe ser igual a la mitad de las armas que vengan. Cada hombre debe recibir dos armas, las balas posibles y trasladarse a Providencia. Allí que manden a avisar a donde yo esté. Todo esto con la mayor rapidez posible, y tú por otro lado me mandas un mensajero hacia acá.

Te adjunto una clave para que me envíes un mensaje por radio rebelde, apenas llegaran armas.

El mensaje debe ser así: La compra para el hospital ha consistido en…

La clave:

springfields= gallinas

garands= gallos

M-1= guanajos

balas 30.06= posturas de malanga

balas M-1= posturas de plátanos

balas 7 M.M= matas de maíz

fusiles 7. MM= chivos

Si vienen otras clases de armas, como fusiles antitanques, trípode, etc.= otros animales grandes.

Si son pistolas, ametralladoras, thomson, etc.= otros animales chiquitos.

Creo que con eso baste.

Me dices simplemente “la compra para el hospital ha consistido en tantas gallinas, tantos gallos, tantas posturas de plátanos, etc.”. El mensaje en cuestión o cualquier otro debe darse al final de la transmisión de las 8, y si es importante, darlo dos días seguidos, porque a veces la sintonía no es clara.

Saludos, Fidel Castro Ruz [firma]

Adicional Si me avisas de las armas por radio en clave, no tienes que mandarme mensajero. Cuando los hombres salgan para Providencia, me puedes decir, que “ya Aldo hizo su trabajo”.

A los periodistas americanos, ingleses y canadienses, les pueden responder que manden el cuestionario, pero que yo estoy en operaciones muy distantes de la planta y se necesita por lo menos una semana para llevar las preguntas y traer las respuestas. Que yo con mucho gusto los atiendo. Puede ser que de un momento a otro mande a trasladar la planta de radio a la zona de Juan Machado.

Si llega algo avísale a Horacio

Sierra Maestra Nov. 17, 58

Eduardo [Fernández]: Hay que trasladar la planta. Hazlo durante el jueves y el viernes, para salir al aire si es posible el mismo viernes por la noche. Tienes que ir para los Pinos, cerca de Juan Machado. [Luis] Crespo te indicará. Lleva todos los aparatos que trajo el avión para ver si sirven de algo en el llano. Voy a ver si consigo por aquí abajo una planta eléctrica. Si la consigo Crespo te dirá. Si no, trae la que tienes. Habla de esto con [Carlos] Franqui, para que lo anuncie y prepare también su traslado. Los locutores deben hacer su casa inmediatamente y tú preparar defensas antiaéreas para el nuevo punto. Juan Machado dará facilidades.

Te repito: que hay que anunciar el día antes que Radio Rebelde no saldrá al aire en dos días, debido a la necesidad de trasladar el equipo.

Saludos Fidel Castro Ruz [firma]

MARTES 18

Sierra Maestra Nov. 18, 58

Un saludo fraternal a todos los vecinos de Cautillo y

Santa Rita que les llevará un valiente soldado revolucionario, compañero Nelson Domínguez.

Fidel Castro Ruz [firma]

S. Maestra Nov. 18, 58

Luis Pérez: Te mando a [Feliciano] Puebla para tu tropa, a petición suya y espero que con resignación tuya.

Fidel Castro Ruz [firma]

El combatiente rebelde Braulio Curuneaux, experto tirador de la ametralladora calibre 50.El bravo capitán Braulio Curuneaux cayó combatiendo en la Batalla de Guisa.

JUEVES 20

Sierra Maestra Nov. 20, 58 4 p.m.

Curunó [Braulio Curuneaux]: Acabo de recibir tu mensaje en este momento 4 p.m.

Después de las 12 horas en que escribiste no he recibido más noticias. Veo que se está luchando intensamente desde hace muchas horas [mapas pp. 550, 552 y 554]. Los felicito por el éxito de esta mañana y espero continúen venciendo. Lamento la muerte del compañero que me informas. Por la noche trataré de hacer contacto directo contigo. Te mando 500 balas 30.06.

Fidel Castro Ruz [firma]

Sierra Maestra Nov. 20, 58

Curunó [Braulio Curuneaux]: Después de analizar detenidamente la situación, de acuerdo con los datos que me brindan distintos compañeros, considero conveniente replegar las fuerzas conformándonos con la espléndida victoria de hoy, por ser imposible y tal vez demasiado ambicioso hacer más. La gente está agotada, no tenemos parque ni minas.

Retira tu tropa hacia acá, así como la de [Rafael] Verdecia y [Reinaldo] Mora [documento p. 517] y cualquier hombre de alguna otra unidad que quede por ahí.

Fidel Castro Ruz [firma]

Sierra Maestra Nov. 20, 58

Ignacio [Pérez]: Se ha combatido durante casi 12 horas; la gente está agotada y el parque muy escaso; el saldo hasta este momento completamente favorable, pero es muy arriesgado proseguir la batalla en el estado del parque y el cansancio de los hombres. Vamos a replegarnos con nuestros laureles [incompleto]

Sierra Maestra Nov. 20, 58

[Luis] Crespo: Necesito que me resuelvas un problema con mucha urgencia. Preséntate donde está [Raimundo] Roselló y dile que te entregue todas las balas M-1, 30.06 y calibre 45 que haya en las Vegas. Manda a buscar a la Plata todas las balas antitanque que allí hay; todo eso y además las minas y bombas de cien libras o de cualquier otra clase que tengas me las envías hasta alcanzarme. En estos momentos estoy en Guisa donde se está librando un gran combate.

También quiero que le pidas a Roselló 400 fulminantes eléctricos, de los que están allí.

Otra cosa: si llegó el avión con armas, Faustino las iba a mandar a Providencia con unos muchachos de la Escuela de Recluta. Tan pronto lleguen ahí, los mandas para acá con todas las armas y balas que hayan llegado.

Espero no te falte un solo detalle. Saludos Fidel Castro Ruz [firma] P. D. Recuérdate que en la Plata hay una bomba de cien libras. Puedes emplear para el transporte de esto los 14 mulos que te mandé recoger.

Fidel, Vilma, Raúl, Paco Cabrera Pupo, Calixto García y otros guerri- lleros rinden tributo al capitán Ignacio Pérez Zamora y a los caídos en el combate en San José del Retiro, Jiguaní, el 19 de diciembre de 1958.

VIERNES 21

Sierra Maestra, Nov. 21 de 1958

Juan Machado [Linares]: Te ruego que me mandes urgente las balas que te llevaron ahí de las que se recogieron en [el almacén] Roca y Álvarez pues las necesito urgente.

Fidel Castro Ruz [firma]

Adicional Juan Machado: Además de las balas que tú tienes ahí y que quiero que me mandes enseguida con el portador, quiero que mandes un hombre urgente a ver a Roselló para que le lleve a las Vegas el papel que va junto con este para él. También quiero que Roselló le mande a [Orlando] Benítez un papel que va para él. Benítez está en el Alto de Mompié, por si no está allí. Benítez que le dé el papel a Baldo [Mauro La Rosa Labrada, Boldo]. Benítez tiene que mandar unas balas que hay en el Alto de Mompié, pero el hombre tuyo no tiene que esperar respuesta de Benítez, para no perder tiempo, sino recoger las balas que le dé Roselló y salir enseguida para ahí y de ahí tú me las mandas. Cuando lleguen las balas que tiene que mandar Benítez, tú me las mandas con otro hombre. Fidel

Sierra Maestra Nov. 21, 58 11 y 30

Curunó [Braulio Curuneaux]:

Yo estoy aquí entre Santa Bárbara y Guisa y no he tenido ninguna noticia de tropa avanzando por este lado. No sé de dónde salió esa noticia. Estoy aquí a solo unos metros del camino. Investiga quién fué el que dió la orden y por qué motivo, porque yo no he mandado a decir una palabra. Además, si vinieran por aquí soldados, tendrían que combatir primero con Ignacio [Pérez] y después aquí con [Reinaldo] Mora. Habría tiempo de sobra para retirar la gente, que en todo caso, en una posición buena, puede siempre esperar la noche.

Te mando este papel, porque me dijeron que alguien les dijo a ustedes de parte mía que se retiraran. Eso no es verdad.

Fidel Castro Ruz [firma]

Sierra Maestra Nov. 21, 58

A cualquier miembro del Movimiento 26 de Julio o del Ejército Rebelde: El portador, que es lechero, tiene permiso para transportar leche al pueblo, haciéndose pasar como persona que no acata nuestras disposiciones, con el objeto de poder realizar misiones muy importantes.

Fidel Castro Ruz [firma]

P. D. Tengo sumo interés en que no se le obstaculice en ninguna forma.

S. Maestra Nov. 21, 58

Luis Pérez: Mándame el Minipax.

Fidel Castro Ruz [firma]

S. M. Nov. 21, 58

Luis Pérez y Mexicano [Francisco Rodríguez]: Los guardias no entraron en Guisa. Curunó [Braulio Curuneaux] ocupó las dos trípodes del tanque. Ustedes deben descansar unas horas y regresar por la tarde a la zona de lucha. Todo el mundo va a seguir hoy en sus puestos.

Fidel Castro Ruz [firma]

Sierra Maestra Nov. 21, 58

Roselló:

Yo mandé a Crespo que recogiera todas las balas que quedaron en esa. Pero necesito que me mandes delante urgentemente tres mil balas de 30.06 y tres mil de M-1.

Fidel Castro Ruz [firma]

P. D. Va un papel para Benítez o Boldo, a fin de que remitan unas balas de fusil italiano. Mándale el mensaje, pero no esperes por las balas italianas porque se perdería un día; me mandas primero las de M-1 y 30.06 que te pido; y luego mandas las italianas a Juan Machado con otro mensajero.

De pie, de izquierda a derecha, los combatientes rebeldes: Ignacio Leal Díaz, Ciro Redondo y Camilo Cienfuegos; sentados sobre unas piedras: Marcelo Fernández Font y el Comandante Fidel Castro.

SÁBADO 22

S. M. Nov. 22, 58 7 y 35 a.m.

Curunó [Braulio Curuneaux]: Hay que prestar un trípode de ametralladora para que

hagan los dos que necesitamos. Mañana mismo estará de regreso. No nos queda otra solución. Préstale el que hizo [Luis] Crespo, para que los hagan igual. Si quieres alguna mejora se la dices. Ven para acá con tus pelotones, que tengo sitio magnífico para campamento.

Fidel Castro Ruz [firma]

DOMINGO 23

S. Maestra Nov. 23, 58

Luis Pérez: Trasládate con tu tropa a la finca de Mon Corona [en Hoyo de Pipa], donde estábamos el día del combate, tan pronto recojas y estés listo. Ruego te apures.

Fidel Castro Ruz [firma]

Sierra Maestra Nov. 23, 58

Cabo García Pérez Soldado Morales

Estimados compatriotas: La compañera Blanca Viamonte me informó de la entrevista con ustedes ayer y el objeto de la misma. Por casualidad me encuentro en esta zona. Comprendo el deseo de ustedes de entrevistarse con un oficial responsable de nuestro Movimiento, pero en este instante es difícil por encontrarnos en operaciones.

El Tte. [Rodolfo] Villamil está muy lejos, por la zona de Estrada Palma. Los otros oficiales del Ejército, Comandante Quevedo y los capitanes Durán [Batista] y [Victorino Gómez] Oquendo están en misiones.

A mi entender ustedes deben actuar rápidamente, antes de que los trasladen, los descubran o lo que es peor, los envíen a combatir contra nosotros, pues en estos días va a haber lucha.

Sería un golpe formidable, que si ustedes pueden contar con un grupo de diez o quince, no se conformen con venir con sus armas simplemente sino que se apoderen por sorpresa de los dos o tres tanques Sherman que hay en la Granja y vengan con ellos. Eso no es difícil. Estudien esa posibilidad, que si lo consiguen, al otro día podemos tomar la Granja con el apoyo de esos tanques, y ocasionar una catástrofe a la Dictadura. Explíquenle a Blanca si consideran esto posible y qué opinan. De todas formas, deben actuar cuanto antes. Tan pronto vengan yo tendré el gusto de recibirlos personalmente.

Un saludo fraternal Fidel Castro Ruz [firma]

El teniente Orlando Rodríguez Puertas, jefe de pelotón de la Columna 1, formó parte del grupo de combatientes que acompañó al Comandante en Jefe Fidel Castro desde su salida de la Comandancia de La Plata hasta el cerco a Santiago de Cuba.

LUNES 24

Sierra Maestra Nov. 24, 58

Se ordena detener al Sr. José Carlos Pérez, que ha-

ciéndose pasar por Teniente Rebelde está cometiendo una serie de abusos contra los vecinos en la zona de Sta. Rita de Veguitas. Debe ser remitido al auditor Jorge Mendoza, quien debe remitirlo a Puerto Malanga mientras se investigan los hechos. Hay contra él numerosas denuncias.

Fidel Castro Ruz [firma]

En medio de la guerra siempre nos preocupó preservar la vida de seres inocentes, en especial mujeres, ancia­ nos y niños, por lo que invariablemente advertíamos con anticipación de los peligros y llamábamos a la eva­ cuación a lugares seguros.

SIERRA MAESTRA 11/24/58

1:00 PM A LOS VECINOS DE GUISA:

Hemos tratado a toda costa de evitar que Guisa se convierta en campo de batalla; incluso durante el curso del violento combate del día 20 en la carretera de Guisa a Bayamo, a unos cientos de metros de ese pueblo no se hizo un solo disparo contra el cuartel, pero el enemigo se empeña en mantener en ese punto una guarnición que nos vemos en la necesidad de rendir o desalojar, y lo que es peor aún, los soldados de la dictadura han convertido en cuarteles y fortificaciones los principales edificios de la localidad.

Ante esta situación el Ejército Rebelde solicita de los vecinos de Guisa que evacuen inmediatamente el pueblo para que nuestras tropas puedan proceder al desalojo de los soldados enemigos, sin que se produzcan bajas en la población civil. Cumplimos un deber humano al advertir este peligro, aunque sea a costa de sacrificar el factor sorpresa. De las pérdidas materiales que se deriven caerá toda la responsabilidad a la tiranía por haber convertido en fortaleza militar una localidad de familias, sin escrúpulo alguno por la vida y los intereses de sus pacíficos habitantes.

La evacuación debe hacerse hacia el interior del territorio libre. Nadie puede moverse hacia Bayamo, Santa Bárbara o Corralillo. Cada familia debe llevar consigo sus objetos de valor.

La población debe protestar enérgicamente contra cualquier intento de impedir la evacuación. Ningún ejército tiene derecho a escudarse en la población civil. Si eso se hiciera sería considerado como un crimen de guerra y en consecuencia los responsables tendrían que responder de sus hechos ante tribunales revolucionarios y no tendrían derecho a ser tratados con las consideraciones que siempre hemos tenido con los prisioneros de guerra.

Fidel Castro

S. Maestra Nov. 24, 58 11 y 40 p.m.

Tte. Puerta [Orlando Rodríguez Puertas]:

He sido informado que los guardias tomaron hoy a las 3 p.m. la loma del Matadero, evidentemente por negligencia de los hombres que debían haberla ocupado desde temprano, de acuerdo con las instrucciones que yo le di a usted, indicándole que debía situar allí 14 hombres armados con Cristobals.

No estoy seguro de que los guardias permanezcan allí todo el día. Parece ser que por las tardes situaban allí una posta hasta por la mañana siguiente.

Hay que estar atento para que sea ocupada, apenas ellos bajen. De permanecer allí, entonces tengo un plan para desalojarlos que llevaré a cabo con una escuadra que está por aquí.

No me descuide esos detalles. Sea exigente con los hombres y adviértales la responsabilidad de estar siempre muy alertas y hacer las cosas bien. Otra cosa: dígale a los hombres que estarán en esa posición del Matadero cerca de ella que no disparen sobre el cuartel si no reciben órdenes, y que hagan fuego solamente si los guardias avanzan sobre ellos.

Hoy hubo combate por el camino del Corojo, con una tropa que venía avanzando. Se le hicieron 4 prisioneros y se les ocuparon 5 armas largas después de rechazarlos.

Mucho éxito. Fidel Castro Ruz [firma]

S. Maestra Nov. 24, 58 11 y 40 p.m.

Curunó [Braulio Curuneaux]:

La gente de Ignacio [Pérez] rechazó sin mucho trabajo

la tropa que venía avanzando, haciéndole 4 prisioneros y ocupándoles 5 armas largas y una microonda.

Te envío el trípode que te faltaba.

Creo que mañana tratarán de entrar. Yo espero que sea un éxito para nosotros por dondequiera que vengan.

Mañana te escribo más extenso. Saludos Fidel Castro Ruz [firma]

El comandante Juan Almeida Bosque, jefe del Tercer Frente Oriental Mario Muñoz Monroy.

MARTES 25

Sierra Maestra, Nov. 25, 58 3 y 15 p.m.

Curunó [Braulio Curuneaux]: Posiblemente el detonador tuyo se humedeció el día de la lluvia, o tal vez se le haya zafado un cablecito dentro. Te envío uno nuevo que tiene mucha potencia. Recuerda que basta que dé una chispita.

Respecto al cuartel de Guisa, ya tenemos una escuadra en la loma de Teófilo de 6 hombres con springfields, en la loma de la Estrella 5 hombres que tienen 1 garand y 4 springfields; en la loma del Matadero le ordené al Teniente Puerta [Orlando Rodríguez Puertas] que está de Jefe de la tropa que mandaba Luis Pérez que pusiera 14 Cristobals. Ayer a las 3 p.m. todavía no la habían tomado y los guardias se posesionaron en ella, pero bajaron por la madrugada y nuestra gente pudo entonces tomarla. Tal vez los guardias choquen con ellos si vuelven a subir.

En esos tres altos que son básicos he mandado hacer trincheras buenas. Ya tengo también alto-parlantes.

El plan mío con Guisa es ir tomando las postas del pueblo una por una, de noche, empleando un mínimo de hombres. Tú sabes que tenemos que ahorrar balas y la única manera es destinando muy pocos fusiles al fuego de hostigamiento. Las balas, más que nunca hay que ahorrarlas para combatir a los refuerzos. Pienso dedicar solo las escuadras que están en la loma de Teófilo y la Estrella para hostigarlos. La gente tuya no debe disparar sino en caso de que se esté combatiendo de día en el pueblo y ellos traten de salir del cuartel para apoyar alguna posta. La gente de Puerta que está en la loma del Matadero, tampoco debe disparar a no ser que le vayan a tomar la loma, pues los Cristobals tienen pocas balas y no hacen gran cosa a distancia. Pienso dejar el mortero 81, para cuando ellos hayan abandonado los edificios del pueblo y se concentren en el cuartel. Por lo demás, mi principal preocupación ahora es que ellos no pasen por el camino del Corojo, ya que sé que por ahí donde tú estás no pasarán de ninguna forma. La tropa que emplee por las noches en Guisa, por el día las tendré en posición para combatir cualquier refuerzo que venga por este camino. Hoy venían avanzando por el mismo lugar que ayer, pero yo mandé poner anoche una mina mucho más adelante, y según me informó Ignacio [Pérez] hace un rato volaron una tanqueta con soldados.

Más atrás de la línea de Ignacio, entre Santa Bárbara y Guisa tenemos otra línea muy estratégica y varias minas. Para nosotros es negocio que manden refuerzos. Guisa caerá pedacito a pedacito. Me parece que todo marcha bien. Manda a buscar mañana dos latas de Milo y varias de leche condensada que me regalaron y te las voy a mandar.

Saludos a tus bravos muchachos. He ordenado para ellos mucha comida que será situada en la casa de [Mon] Corona.

Fidel Castro Ruz [firma]

Sierra Maestra Nov. 25, 58 3 y 30 p.m.

Tte. Puerta [Orlando Rodríguez Puertas]:

Los hombres suyos deben hacer muy buenas trincheras en la loma del Matadero [documento p. 516], contra avión y contra morteros. No deben estar además muy juntas. Como esos hombres están armados de Cristobals y el parque está escaso, no deben disparar sobre el cuartel aunque sepan que se está combatiendo en el pueblo, pues no reportaría gran beneficio y se gastarían balas. Si usted viera que en el pueblo se está luchando y desde esa posición se pudiera hostigar con éxito a los guardias del cuartel, sustituya entonces cinco hombres de Cristobals, mándelos para donde está la 30, y ponga allí 5 springfields, para que disparen con mucha puntería y muy de cuando en cuando. Pero sobre eso no hay apuro. El cuartel no interesa por ahora, lo que interesa es rechazar los refuerzos. Contra la guarnición voy a emplear muy pocos hombres, atacando las postas una por una, de noche preferentemente. Las escuadras que se dedicarán preferentemente a hostigar a la guarnición son dos que están situadas en la loma de Teófilo y en la de la Estrella. Los del Matadero, por ahora, van a estar allí para impedir que ellos la tomen o traten de salir por ese lado. Espero puedas captar mis ideas respecto a la guarnición.

Por experiencia sé que si empleamos muchos hombres contra guardias atrincherados gastamos todo el parque. Vamos a obligarlos a ellos a que tengan que avanzar con los refuerzos contra nuestras posiciones atrincheradas. Si rechazamos los refuerzos, los de adentro no tienen salvación posible.

Saludos a los compañeros Fidel Castro Ruz [firma]

P. D. Por el camino del Corojo, hoy se voló una tanqueta con guardias de una tropa que venía avanzando.

Braulio Curuneaux con su inseparable ametralladora calibre 50.

LUNES 26

Sierra Maestra Nov. 26, 58

[Evelio] Laferté: Leí tu carta a Montero [Ricardo Montero Duque, capitán del Ejército de la tiranía]. No puede ser realmente más convincente y emotiva. Creo que algún día debe publicarse.

Sobre lo de la muchacha me parece que debes consultar tus dudas con el propio Montero, diciéndole que yo queriendo complacerlo mandé ponerla en libertad; pero que en ausencia mía, por considerar el riesgo que implica han aplazado la ejecución de la orden, en espera de nuevas instrucciones en vista de nuevas sospechas. En fin que el asunto debe tramitarse con la mayor delicadeza para él; y decide tú en último término lo que creas mejor. ¡Cigarros! ¿Es posible que por ahí no se pueda conseguir ni una caja? Te mando 25 pesos para gastos personales.

Para el caballo te mando 100 pesos. No es mucho pero puedes hacer la compra de uno bueno en dos plazos y respondo al crédito.

Un abrazo para [Rodolfo] Villamil y para ti. Fidel Castro Ruz [firma]

P. D. Noticias: Tenemos sitiado a Guisa y estamos fuertemente atrincherados en espera de los refuerzos [mapa p. 556]. La acción se está librando en dos etapas. Hubo que hacer un receso el día 21, parte por un error de información y parte por exceso de cansancio en el personal y escasez de parque. La cuestión fue que después de rechazar un refuerzo luego de combatir 10 horas el día 20 por la noche, obrando de acuerdo con los informes de un capitán que aseguró que los refuerzos habían penetrado al fin al anochecer, y viendo yo que no había balas, ni minas, y la gente estaba agotada ordené replegarse a la tropa, pero mandé a buscar balas y minas urgentemente y dos días después ocupamos de nuevo posiciones que va a ser duro romperlas. Tenemos 31 armas más entre ellas dos trípodes, balas y minas de reserva. Moral alta, trincheras por centenares y deseos de vencer. Por un inexcusable error, el mando del enemigo reforzó solo con 40 hombres la guarnición el día 21 y no tomó ninguna de las posiciones claves que están hoy en manos nuestras. El 24 y el 25 se rechazaron los refuerzos por el camino del Corojo. Todo parece marchar bien.

Fidel Castro Ruz [firma]

Sierra Maestra Nov. 26, 58

A todos los muchachos de Radio Rebelde: Aquí estoy echándole de menos a ustedes. Ya tengo altoparlantes pero no tengo locutores. Pronto va a llegar aquí una planta transmisora potente, pero sin Eduardo [Fernández] y ustedes nada funciona.

Tenemos una fuerte línea de defensa entre Bayamo y Guisa. Es como un Jigüe pero a las puertas de Bayamo. Aquí la pelea es contra tanques, pero ya hay uno boca-arriba. No tengo aquí a los veteranos, pero la tropa se está portando bien. Curunó [Braulio Curuneaux] hecho un león; ha abierto en un firme más de 200 trincheras. Picos y palas por la libre. La gente, buena, y acariciando todos la idea de comprar en Guisa muchas chucherías.

Abrazos a todos Fidel Castro Ruz [firma]

Un abrazo, Celia Sánchez Manduley [firma] 11/26/58

Eduardo Fernández, técnico de la planta trasmisora de Radio Rebelde.

JUEVES 27

Sierra Maestra Nov. 27, 58 9 p.m.

Puerta [Orlando Rodríguez Puertas]:

Los guardias están retrocediendo. Al anochecer sele puso una emboscada entre Guisa y el entronque de la Central y parece que cayeron en ella. Queda un grupo atrás que no pudo retirarse temprano porque tenían dificultades para pasar los tanques ligeros. También les tengo puesta una emboscada pero temo que si los primeros cayeron en la otra, estos no se atrevan a seguir retirándose de noche. Ha sido una gran victoria [mapa p. 558], aunque nos costó la pérdida del mejor oficial que contábamos [Braulio Curuneaux].

Mañana con toda seguridad que no vienen refuerzos. Todo lo más, ayudarán a sacar a los que quedan por el puente si no salen esta noche. Así que mañana le puedes dar descanso a tu tropa por esos alrededores. Los únicos que tienen que permanecer en su posición son los del Matadero. Pero, dale instrucciones de que hasta nueva orden no disparen sobre el cuartel. Fíjate bien: podemos hacerles un truco, haciéndoles creer que allí no hay nadie. Eso servirá para dos cosas: que los aviones no les tiren y la posibilidad de que los guardias suban allí y puedan hacérseles varias bajas. Manda dos o tres hombres a buscar balas. Me dices cuántas armas tienes y de qué calibre y cuántas balas tienen de promedio aproximadamente. Dime si te queda dinero y si pasan mucha hambre [documento p. 523].

Saludos. Fidel Castro Ruz [firma]

Adicional Si los guardias de Guisa tratan de irse, los del Matadero deben abrirles fuego. Pasado mañana temprano todo el mundo debe estar de nuevo en su posición. Aprovechen el tiempo para mejorar las trincheras todo lo que puedan.

Sierra Maestra

Sr. Teniente [Renaldo Blanco, jefe Co. de Guisa]:

El portador lleva un mensaje mío para usted. Deseo que usted entienda que hablo con el más fraternal propósito. Sé que usted es un militar recto y valiente, algunos piensan que algo duro con el pueblo, pero usted es demasiado joven para tener mancha. Su vida es hoy como un libro en blanco que usted puede llenar de páginas gloriosas al servicio de la patria: usted tiene en sus manos su propio destino; junto a la tiranía que ha ensangrentado nuestra tierra usted cometería el crimen de manchar su vida joven sin remedio posible. Morir en aras de una causa injusta que aborrece nuestro pueblo no honra a nadie. Nadie se detendrá mañana a rendir un tributo en la tumba de un defensor de la dictadura y vivir después de haberla defendido es peor que morir, porque se carga por toda la vida el peso de esa infamia sobre usted, el temor a la muerte en nada puede influir; pero sí debe influir el temor a la deshonra. Sin honra no hay valor verdadero; todo lo más un valor irracional que hasta los animales lo poseen.

Nadie puede ser verdadero militar cuando no dedica su energía y su valor a defender algo noble. Los grandes militares ganaron su fama y su gloria combatiendo por su patria y su libertad. Por eso ningún general de España podría brillar como Maceo. Ningún militar de Europa pudo superar a Napoleón, que era un oficial revolucionario; como ningún general romano pudo compararse con Aníbal. Solo junto a la causa justa de la libertad y de la patria el talento militar se desarrolla. [En] Los mismos soldados, nunca podrá compararse el entusiasmo del que lucha por un ideal voluntariamente con el desgano de los hombres que son obligados a morir por bastardos intereses. Nosotros no descansamos ni de día ni de noche, no hay distancias, no hay esfuerzos, no hay sacrificios que nos desalienten. La causa es solo una: la convicción de que estamos cumpliendo un deber sagrado. No confunda usted la honra verdadera con la honra falsa.

Usted como todo cubano está en el deber de servir a su pueblo. Lo honrado sería que usted combatiera a la tiranía y no a la revolución que quiere el bien de todos los cubanos incluso los militares. Aquí están siendo atendidos los heridos de esa guarnición; los prisioneros han sido tratados con todo respeto, como es proverbial en nosotros. Sentimos que algunos cayeran. La acción estaba dirigida a otros fines, no contra esa tropa de Guisa. Guisa no nos interesa, nos interesa Bayamo. No se disparó contra ese cuartel un solo tiro; y ojalá no tenga que derramarse una sola gota de sangre entre esos soldados y nosotros, y eso depende de usted esencialmente. Lo que usted decida lo decidirán sus soldados, toda la vida le agradecerán que usted los salve de la deshonra y de tal vez la muerte, aunque algunos de ellos hoy no lo comprendan claramente. Si no lo hace, el día de mañana sus propios hombres se lo echarán en cara. Cuando cayó Machado los soldados culparon a los oficiales por no haberles orientado como jefes que eran y los destituyeron de sus mandos. La inmensa mayoría de los oficiales están enteramente contra la Dictadura, pero sin embargo se les hace muy difícil actuar. Hay un modo muy sencillo: confraternizar con los revolucionarios y negarse a seguir defendiendo la tiranía; así podría terminarse la guerra sin más sangre, y para eso no hace falta conspirar sino tomar decisiones. Es algo que pueden hacer o no todos los oficiales dignos y todas las unidades; así borrará el Ejército de Cuba toda la deshonra y la sangre fratricida que ha lanzado este régimen contra los institutos armados. Yo a usted no lo invito a rendirse, porque ni lo estoy atacando ni deseo atacarlo; lo invito a usted y a sus hombres a que se unan a la revolución que es lo que deseamos de todos los militares honorables y no combatir contra ellos.

Espero que un hombre joven como usted comprenda y sepa apreciar estas sinceras palabras y no malgaste su energía, su valor y su juventud en aras de una infame y vergonzosa causa.

Fidel Castro R.

Noviembre 27 de 1958

Dr. Fidel Castro Comandante Jefe:

El portador, Sr. Carlos Hernández Miranda, fué mi jefe en Camagüey como Coordinador Provincial de Propaganda; es un gran luchador y un elemento puro, desinteresado y noble. Ya es imposible que trabaje en Camagüey y desea quedarse en Territorio Libre si usted lo aprueba.

[Carlos] Franqui no ha llegado todavía por lo que la Comisión que usted nombró sigue funcionando, cuando llegue le entregaremos la dirección de Radio Rebelde.

Comandante, estoy a su entera disposición si me necesita con los magnavoces que le han llegado. Aunque de esto no he hablado con Orestes [Varela] y Ricardo [Martínez], estoy seguro que ellos están igualmente dispuestos a servirle donde podamos ser útiles.

Siempre a sus órdenes: Jorge E. Mendoza

P.D.Comandante: Si usted lo autoriza desearía que el Sr. Carlos Hernández se quedase a trabajar conmigo en la Auditoría. Jorge E. Mendoza

Mendoza: No tengo objeción alguna en lo que me pides. [firma]

Dr. Fidel Castro

Comandante Jefe E.S.M.

RADIO REBELDE

Hoy se conmemora un aniversario más del fusilamiento de los Estudiantes en 1871.

El Ejército Rebelde, que tiene en sus filas de hombres y mujeres del pueblo a tantos estudiantes que han dado el ejemplo más alto de desinterés y sacrificio, saludan en este 27 de Noviembre la presencia de los compañeros dirigentes de la Federación Estudiantil Universitaria en las ya invencibles columnas que avanzan en la lucha final contra la Dictadura.

Esta fecha -que tantas veces celebramos del brazo de nuestros compañeros estudiantes, en las luchas de calle contra la Opresión- nos brinda una evocación de especial significación, en momentos en que se incorporan al Ejército Rebelde, cientos de soldados del Ejército de Cuba.

Junto al recuerdo de los mártires del 71, brilla en la Historia el nombre de Nicolás Estévanez, el bravo oficial español que quebró su espada en la Acera del Louvre, antes que hacerla cómplice de un crimen abominable.

Aquel gesto, valiente y resuelto del Capitán Estévanez, salvó, en días de oprobio, el honor del Ejército de España. No quiso Estévanez luchar contra sus compañeros, pero en gesto de noble hidalguía militar, supo quebrar su espada, antes que mancharla con la sangre de unos inocentes.

Aquella actitud de un militar de dignidad, capaz de volver sus armas contra el Abuso, la Injusticia y el Crimen; vuelve a repetirse 87 años después, al plantearse otra vez en Cuba, la lucha necesaria entre la Libertad y el Despotismo.

Como ayer el Ejército Español pudo dar un Nicolás Estévanez; hoy, el Ejército de Cuba tiene también militares de dignidad y pundonor que unen sus armas al pueblo:

Cada militar cubano -como los tenientes [Rodolfo] Villamil y [Ubineo] León, como los soldados y clases de la compañía de Charco Redondo, como tantos y tantos hombres de uniforme que diariamente se incorporan al Ejército Rebelde-, cada militar capaz de comprender que no puede haber dignidad, jerarquía ni mando honorable en jefes que sean vulgares ladrones o cobardes asesinos; cada militar consciente de su deber patriótico que procura su honra uniéndose a las columnas de la Libertad; cada militar que abandona la comodidad del cuartel por la vida esforzada del rebelde, merece respeto y gratitud de la Patria, y su gesto de hoy, sabrá registrarlo la Historia con igual consideración al que hoy evocamos de Nicolás Estévanez, el bravo oficial español que quebró su espada el 27 de Nov. de 1871, avergonzado ante el crimen repugnante e inútil.

Sierra Maestra

Segundo Frente

Casi no entender mensaje.

Avión derribado hacer pedazo todo.

Yo estar zona Guisa guarnición cercada, batalla desarrollar frente a Bayamo. Enemigo no poder mover tropas para otros frentes. Tú aprovechar continuar ofensiva.

Fidel Castro R.

Faustino [Pérez]:

Te adjunto un acta sobre robo de ganados que me envía Víctor Mora. Los acusados han sido enviados para Puerto Malanga según me informan.

Fidel Castro Ruz [firma]

De forma constante exaltábamos el espíritu irredento de nuestro pueblo en pie de lucha, fiel al legado de los pró­ ceres de las contiendas mambisas por la independencia y la justicia.

AL PUEBLO DE CUBA:

La decidida y viril actitud adoptada por el pueblo de Cuba frente a la usurpación del 10 de marzo ha revelado que nuestra nación no sabe vivir sin libertad y que está dispuesta a obtenerla cueste lo que cueste; ésa ha sido la conducta del criollo a través de la Historia y la generación actual está cumpliendo cabalmente con esa tradición. El mismo espíritu libertario y afán de justicia que impulsó a Agüero y Armenteros, a Céspedes y

Agramonte, a Maceo y Martí, es el que hoy está llevando a los hombres y mujeres de Cuba a escribir las páginas más hermosas de nuestra etapa Republicana. Hay tanto arrojo, tanto desinterés, tanta abnegación en los que hoy luchan, que los ojos del mundo están puestos sobre la situación de Cuba.

Ya hemos dicho que la lucha por la Libertad es la más hermosa de todas las batallas. En la obra cumbre del idioma castellano se escuchan de labios de El Quijote estas palabras:

La libertad es uno de los más preciados dones que a los hombres les dieron los cielos, con ella no pueden igualarse los tesoros que encierran la tierra y el mar, y por ella como por la honra se puede y debe aventurar la vida.

Y por ser libres los cubanos lo están dando todo, lo están aventurando todo, hasta la propia vida.

Pocos ejemplos tan hermosos como éstos ha registrado la historia de la Humanidad. Nunca aceptaremos las cadenas, la esclavitud jamás ha sido nuestra vocación. Como pueblo, los cubanos de hoy aprendieron del apóstol que “la perla está en su concha y la libertad en el espíritu humano”. Dos cosas hay que son gloriosas: el sol en el cielo y la libertad en la tierra.

Mintiendo al Ejército, el tirano pretendió ahogar nuestras ansias de libertad, continuar la usurpación, mantener la injusticia, prolongar el crimen; pero se puede mentir hasta un día porque la verdad [que] no es cosa que pueda sepultarse indefinidamente. Recordemos con Lincoln “que puede engañarse a todo el pueblo una vez, que puede engañarse una parte de él todas las veces, pero no puede engañarse al pueblo todas las veces”.

Ya el pueblo todo de Cuba y Unidades enteras del ejército, han comprendido la razón y la justicia de esta causa libertaria; allí están los 52 militares de Charco Redondo encabezados por los tenientes Rodolfo Villamil y Ubineo León Sánchez, que vinieron a confraternizar con su pueblo trasladándose al territorio Libre de Cuba.

Siempre es lamentable la sangre derramada entre cubanos; pero nosotros no provocamos esta guerra, esta guerra la provocó la tiranía. El Ejército de la República es una institución pública al servicio del bienestar del pueblo y no de la tiranía actual que está atentando contra Cuba y contra su destino. Decía Martí que “las instituciones públicas no andan seguras sino cuando se cimentan sólidamente en el bienestar del pueblo”. Por eso, día tras día llamamos a los militares que tengan sus manos limpias de sangre y oro mal habido para que vengan a confraternizar con su pueblo en el Territorio Libre de Cuba, como ya lo hicieron los 52 soldados, clases y oficiales de Charco Redondo.

La actual tiranía hace más de 6 años está dañando a la Patria de todos. Desde el 10 de marzo del 52 nada ni nadie está seguro en Cuba. Bajo las cadenas de la opresión: CUBA SUFRE. El hombre es aquí un verdadero paria. Las conquistas sociales del obrero han sido destruidas de un solo tajo. Todas las clases del país, desde las más altas hasta las más humildes, se han visto lesionadas por las arbitrariedades de la tiranía. Por romper esas odiosas cadenas, por sacar al cubano de tan humillante situación, trabajamos incesantemente. Nadie tiene el derecho de dormir tranquilo; mientras haya un solo hombre infeliz y sin libertad y justicia no puede haber felicidad.

Estamos a un paso de derrocar al régimen de las provocaciones, al mantenedor de la desigualdad, el crimen, la esclavitud y lo injusto.

En esta hora decisiva, Cubanos [Cubano], no le niegues a la Patria tu concurso. No es la hora de las vacilaciones, no es la hora de colocar su interés personal sobre el de todo un pueblo, no es la hora de sentarse a esperar para que otro resuelva.

Cubano, al alcance de tu mano está el resorte maravilloso que dará al traste con toda la ignominia de la dictadura. Es la HORA DE LA REVOLUCIÓN, ES LA HORA QUE MARCA EL MERIDIANO DE LA LIBERTAD.

FIDEL CASTRO R.

 

Indice | Presentación y Introducción  | Capítulo I | Capítulo II

Capítulo III | Capítulo IV | Capítulo V | Capítulo VI

 

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